BUENOS AIRES (Télam).- El cineasta Tristán Bauer, autor del multipremiado filme "Iluminados por el fuego", afirmó que una solución posible para recuperar las islas Malvinas "es trabajar desde la coherencia y la paz, desde la Argentina y desde una fuerte política latinoamericana".
"Debemos lograr que todos los latinoamericanos
reclamen este territorio como propio", dijo Bauer, quien en su película narró los dramas de los ex combatientes de la guerra que tuvo lugar en abril de 1982 entre Argentina e Inglaterra por la soberanía del archipiélago argentino.
Según el cineasta, "existe una resistencia muy fuerte de parte de Gran Bretaña, pero también hay una situación muy favorable para los latinos y creo que hay que buscar fórmulas y espacios nuevos y trabajar desde la Argentina, desde el Mercosur y desde el conjunto de Latinomérica".
"Creo que la negociación internacional es fundamental para marcar la soberanía argentina en Malvinas. Es un camino que debe ser siempre por y desde la paz, y debe ser un reclamo de toda América Latina", opinó Bauer. Y añadió: "Los argentinos y los latinoamericanos deberíamos trabajar para ocupar un espacio en Malvinas. En ese sentido, un primer paso sería crear en las islas un centro de estudios universitarios latinoamericano".
Sin embargo, Bauer sabe que cualquier iniciativa se enfrentará a la oposición del gobierno inglés, que mantiene una base militar en las Malvinas. "Estratégicamente todo el tráfico del mar del sur pasa por esa zona y, en ese sentido, las Malvinas son fundamentales. No nos olvidemos que la actitud de Gran Bretaña fue y sigue siendo colonialista", recordó el cineasta.
"Los ingleses mantienen una base militar en Malvinas y muchos de los militares que están hoy en Basora (sur de Irak) pasaron por esa base, que se usa para la formación de soldados para la guerra, en un territorio que le pertenece a América Latina", se quejó el realizador.
El director de "Iluminados por el fuego" reiteró que "el reclamo debe hacerse en todos los foros internacionales y desde la paz" y sostuvo que "el conflicto de Malvinas es un lugar de nuestra historia que duele, un lugar sobre el cual debemos seguir reflexionando, y también el último eslabón de la dictadura".