Domingo 01 de Abril de 2007 Edicion impresa pag. 37 > Policiales y Judiciales
Caso García Belsunce: se desvanece la coartada de la familia
Los nuevos testimonios perjudican la versión de Carrascosa

BUENOS AIRES (Télam)- La coartada de Carlos Carrascosa sobre el día en que fue asesinada su esposa María Marta García Belsunce comenzó a desvanecerse la semana pasada partir de los dichos de varios testigos, que reforzaron la hipótesis de que el acusado y su familia siempre supieron que fue un crimen y trataron de encubrirlo.

Las declaraciones que se produjeron en el juicio oral que se realiza por el caso, también parecen haber llevado a la escena del crimen a la hermanastra de la víctima, Irene Hurtig, quien hasta ahora no estaba imputada aunque podría ver complicada su situación una vez que termine el proceso contra su cuñado.

La seguidilla de testimonios contra Carrascosa, juzgado por homicidio calificado o encubrimiento, genera euforia en el fiscal Diego Molina Pico, aunque las disputas que mantiene con sus tres colegas en el proceso podrían hacer naufragar su objetivo principal: lograr la condena del viudo.

La defensa de Carrascosa y la querella -que apoya al acusado- no lograron por ahora hacer trastabillar a los testigos clave de la fiscalía, pese al apoyo que desde la "platea" le brindan familiares y amigas que les pasan papelitos con preguntas.

La semana que pasó no podía haber sido peor para Carrascosa y sus familiares: los testigos que desfilaron ante el Tribunal Oral en lo Criminal 6 de San Isidro hicieron trizas la versión de lo que dicen que ocurrió el 27 de octubre de 2002 en el country Carmel de Pilar.

Todos siempre afirmaron que María Marta murió tras golpearse y caer en la bañera lindera a su dormitorio, un accidente casero, y que la enterraron sin someterla a ninguna autopsia porque nadie les había advertido que podría tratarse de un asesinato.

El jueves, el médico Santiago Biasi aseguró que le dijo tanto a Carrascosa como a otros tres familiares que la mujer había tenido una "muerte violenta" y que debían llamar a la Policía. Allí,sintió que había una "trama orquestada", que no tenía que estar en ese lugar.

Use la opción de su browser para imprimir o haga clic aquí