La algarabía del final cuando ya se supo que Madryn había superado a Huracán por 3 a 2, dio paso a las lágrimas de los hombres 'naranjas'. Fundidos en un abrazo interminable en el centro de la cancha, los jugadores y cuerpo técnico expresaron su desahogo, felicidad y muchas cosas más.
Quebrado por la emoción, el entrenador del 'Depo', Martín Medina alcanzó a decir: "La verdad es que hemos luchado contra un montón de cosas. Afrontamos esta parte final con un plantel reducido, casi sin recambio, perdiendo partidos en donde merecimos mejor suerte... Pero la verdad es que Dios se acordó de nosotros a último momento, y lo que no ligamos en los últimos encuentros, lo ligamos hoy (ayer). Se dieron los resultados y pudimos quedarnos en la categoría. El objetivo está cumplido".
A fuerza de capacidad y rendimiento, el capitán Carlos Arancibia fue un referente, dentro y fuera de la cancha. La ovación final para el zaguero así lo certificó. "Mirá lo que es esto (señalando a los hinchas, que festejaban colgados del alambrado). Sufrimos hasta el final, pero lo logramos. estoy muy agradecido con la gente de Roca, que la verdad que se merece este festejo por todo el apoyó que nos brindó".