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Sábado 31 de Marzo de 2007
 
Edicion impresa pag. 32 > Sociedad
Arreglátu PC
El puerto USB no funciona. La grabadora de DVD no graba. El monitor no muestra colores. Windows arroja errores. No podemos navegar por internet...

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Estos son, entre tantos otros, algunos de los problemas de los que mes tras mes se quejan nuestros lectores. Por eso armamos este completo informe en el que les contaremos todos los secretos de un técnico al momento de arreglar la PC.

 

Diagnóstico de problemas

 

El primer paso antes de poder comenzar con la reparación de nuestra computadora es detectar y diagnosticar el problema que la aqueja. Básicamente, tenemos dos tipos de inconvenientes según el momento en el que se presentan: los problemas de inicio y aquellos que se dan durante el funcionamiento de la PC.

Encontrarán los problemas típicos en cada etapa del funcionamiento de la PC y los posibles diagnósticos en cada caso. Omitimos los problemas de apagado, que si bien existen, son muy pocos y, por lo general, no afectan tanto el uso de nuestra computadora.

Problema de inicio

Problema

La PC no enciende.

Diagnóstico

Fallas con el botón Power ON o la fuente. Conflictos con la alimentación eléctrica del motherboard. Problemas en el cableado. Problemas de tensiones. Falla en el dispositivo regulador de tensión al que está conectada la PC (UPS).

Problema

La PC no bootea.

Diagnóstico

Errores en la configuración del BIOS, puede ser por fallas en la CMOS, por cambios realizados por el usuario, o por modificación en la configuración de hardware. Falsos contactos en placas de expansión o memoria. Mala conexión de unidades de almacenamiento. Fallas en el MBR del disco de booteo. Mala configuración de jumpers. Conflictos con el procesador. Falta del disco de booteo. Fallas en el motherboard.

Problema

Fallas en la carga del sistema operativo.

Diagnóstico

Conflictos de recursos. Problemas en el disco duro. Mal particionado del disco. Error en el sistema de archivos. Fallas en la instalación del sistema. Drivers incompletos, inservibles o incorrectos. Mala configuración de video. Virus, malware que afecta los archivos del sistema. Archivos de sistema perdidos. Alteración del Registro de Windows. Programas o servicios de inicio con errores.

Problemas de funcionamiento

Problema

La PC se congela ("se tilda").

Diagnóstico

Infección de virus o malware. Conflictos con el Registro. Conflicto de recursos. Conexiones flojas o deficientes (placas de expansión, memorias). Recalentamiento del sistema. Fallas en el disco duro (sectores defectuosos). Fallas en la memoria (pérdida de datos). Fallas en el microprocesador.

Problema

La PC funciona lentamente.

Diagnóstico

Conflictos en el Registro. Servicios y programas residentes en memoria. Malwares o virus ejecutando tareas en segundo plano. Falta de espacio en el disco duro. Incompatibilidad de software o hardware. Falta de memoria RAM. Programas con "memory leaks" o bugs de este tipo.

Problema

Fallas de dispositivos o periféricos. Errores aleatorios.

Diagnóstico

Según el tipo de problema, los orígenes varían. En el caso de problemas de imagen, es probable que se trate de la placa de video o el monitor. Si las fallas son de audio, los posibles responsables son la placa de audio o los parlantes. Falta de drivers o drivers incorrectos. Conflictos de recursos. Suciedad en periféricos. Mala conexión de puertos. Carga baja en dispositivos a batería.

Problema

Fallas en redes o Internet.

Diagnóstico

Error de configuración de protocolos. Daños en cableado. Falta de servicio del proveedor. Falta de energía en módems USB. Conflicto de

recursos en módems y placas de red internas. Malware. Tiempos de respuesta extensos.

Problema

Problemas en aplicaciones.

Diagnóstico

Falta de códecs. Incompatibilidad con el hardware o el sistema operativo. Falta de archivos de sistema. Archivos de instalación corruptos. Bibliotecas o drivers desactualizados.

 

Mal de males: Cuando el problema es Windows: no sólo el lenguaje que entiende nuestra PC es binario, pareciera que todo en la computadora puede definirse en dos términos. El origen de los problemas no es la excepción, y cuando no es el hardware el que perturba, seguro el software, y sobre todo Windows, es el principal sospechoso.

Aunque no es difícil confundir los problemas producidos por el hard (y que obviamente repercuten en el soft) de los que son puramente del software, es posible realizar una clara distinción si usamos las herramientas que Windows nos brinda.

Analizaremos cada uno de los informes generados por el sistema operativo, veremos cómo comprender los mensajes de error y, sobre todo, cómo solucionarlos.

 

La pantalla azul de al muerte (Blue Screenof Death): La popular pantalla azul de la muerte (BSoD) que ha caracterizado a Windows más que su propio icono, es una (odiosa) manera del sistema operativo de informarnos sobre un error. En el caso de Windows XP, la instancia que lleva a este extremo, en que no tenemos otra alternativa más que reiniciar el sistema, se trata generalmente de un error del propio núcleo de Windows o de un driver específico.

En el caso de un driver, el error puede ser por el software controlador, o por el hardware que controla. En contadas ocasiones puede ser una aplicación la que genere este tipo de errores. Puede surgir un conflicto si un programa accede de manera directa al hardware y existe un problema con el driver instalado (por ejemplo, al tratar de discar con un módem dialup, en juegos al acceder a opciones de la placa de video o en mensajería instantánea al intentar utilizar una webcam). En versiones de Windows anteriores (Win 9x) no existía un control sobre los errores producidos por aplicaciones, por lo que este tipo de pantallas eran más comunes.

 

La solución

 

En este caso, la solución varía totalmente de acuerdo con el origen del problema. Si el error es producido por el núcleo de Windows, veremos dentro del código de error la palabra Kernel, o algún archivo de sistema involucrado (ntoskrln, win32k.sys, esbstor.sys, usbyhci.sys). En este caso no quedará más remedio que analizar el archivo de

Conclusiones

Prácticamente no se aprecia demora alguna en el envío de la orden de impresión, es como si la impresora estuviera conectada por cable directamente al equipo, ya que la velocidad de la norma Bluetooth es similar a la del puerto USB y levemente más rápida que la del paralelo. La señal entre ambos dispositivos es excelente. Según las especificaciones del producto, alcanza los 100 metros.

Lo probamos con una distancia de 40 metros y la recepción seguía siendo óptima. Un punto flojo para mencionar es que en el breve lapso (de unos segundos) en que se emiten los datos, la antena genera interferencia en los parlantes de escritorio. Suena, y bastante fuerte, un silbido agudo, que resulta molesto.

Es una lástima que no se hayan incluido drivers para el sistema del pingüino.

 
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