ROCA (AR).- La causa por las aberrantes prácticas sexuales a las que eran sometidas nenas a cambio de un plato de comida o unas monedas, y que en algunos casos tenían sólo 10 años, fue elevada a juicio ayer por el fiscal Miguel Fernández Jahde.
En el expediente se encuentran procesados Alberto Fasanella y Fernando Andrés Reguera. Sólo el primero de ellos está detenido, ya que el ex bancario Andrés Reguera pagó una caución de 10.000 pesos y gracias a eso siguió en libertad.
Ambos están acusados de delitos contra la integridad sexual, que incluye abuso sexual y producción de imágenes pornográficas, ya que en la casa de Fasanella, donde se realizó el primer operativo y dejó al descubierto lo que padecían las niñas y adolescentes, se secuestró abundante material fotográfico.
En ellas se veía a las menores de edad en poses de
alto contenido erótico, e incluso, una de ellas fue fotografiada desnuda mientras comía un plato de guiso.
Según trascendidos tribunalicios, además de la evidencia fotográfica, para el fiscal Fernández Jahde fueron contundentes los relatos de las menores de edad, que no sólo involucran a los imputados, sino que los dichos tienen correlación y se entrelazan entre sí.
Tras la elevación a juicio, se correrá traslado a los defensores que intervienen en la causa. Oscar Pineda patrocina a Fasanella, mientras que Jorge Crespo hace lo propio con Andrés Reguera.
Los abogados tendrán un plazo de tres días hábiles para plantear alguna oposición.
Sin embargo, se supone que no lo harían, ya que Crespo apeló el procesamiento del ex bancario, y la Cámara Tercera del Crimen rechazó el planteo y confirmó lo resuelto por el juez de instrucción Pablo Iribarren.
Si no hay oposición, el paso siguiente será que la Cámara de juicio fije fecha para el inicio de los debates, que serán a puertas cerradas por ser las víctimas menores de edad.
Estimativamente, se cree que en junio podría comenzar a llevarse adelante este juicio, que causó conmoción en Roca y la región por tratarse de un delito que al menos no es habitual que sea descubierto.
Las aberrantes prácticas quedaron al descubierto tras un allanamientos realizado el 24 de mayo de 2006 en la vivienda de Fasanella, ubicada en Neuquén al 600 de esta ciudad. En realidad, la policía llegó al lugar en busca de una menor de 13 años que se había ido de su casa varios días antes.
Sin embargo, los uniformados se sorprendieron al encontrar las fotos de las menores pegadas en una lámina de telgopor como si se trata de un póster, al igual que osos y muñecos de peluche colgados en el techo de la habitación de Fasanella.
Tras el testimonio de las menores, no sólo se complicó la situación de Fasanella, sino que también acusaron a Andrés Reguera, quien el 4 de octubre pasado prestó declaración indagatoria y el 20 días más tarde fue procesado, aunque no fue detenido por el pago de la caución.