NEUQUEN (AN).- San Eduardo parecía el reino de lo posible, a caballo de la explotación de carbón en un país que era otro en la década del '40. El principio del fin del pueblo carbonero comenzó la mañana del 29 de marzo de 1951 cuando la mina estalló y en ese acto cargó con una decena de vidas de mineros que no querían trabajar ese jueves santo. Seis de los cadáveres nunca fueron encontrados.
Este jueves a las nueve de la mañana una delegación de sobrevivientes y de viejos habitantes se hermanarán en una misa junto a lo que queda de la mina de carbón, ubicada a 30 kilómetros de Chos Malal. Pero la reunión no será sólo para recordar a los fallecidos sino que propone el festejo del reencuentro de hombres y mujeres de entre 75 y 80 años.
"Hay gente que hace más de cincuenta años que no se ve y hay hombres que nacieron en ese lugar y que nunca volvieron", explica Carlos Monsalve, el padre de la iniciativa. Es que la idea de volver a San Eduardo (acaso el primer pueblo fantasma de Neuquén) surgió en el programa"Cuecas y Tonadas" que desde hace dos años conduce en la FM Mix (105.5), los sábados de 12 a 14.
Con Monsalve colabora Manuel Borquez, ex minero de San Eduardo, y a partir de algunos comentarios los teléfonos de la radio empezaron a sonar y la posibilidad comenzó a tomar fuerza. El vicegobernador Federico Brollo hizo las gestiones para conseguir el transporte, la municipalidad de Chos Malal llevará a algunos vecinos desde la ex capital, aportará agua y hará una colaboración general para que todo salga bien.
"Bajará gente de Barrancas, de Las Ovejas y Buta Ranquil: es a la canasta porque viajamos para pasar la noche en el lugar donde vamos a colocar una bandera argentina y otra de la provincia", dijo Monsalve, conocido camarógrafo de Neuquén, oriundo de Chos Malal.
"Yo no tengo nada que ver con esa vieja mina, salvo que soy de por allá. Mi padre (José Ceferino) solía trabajar en la actividad porque por aquellos años era muy bien retribuida", sostuvo Monsalve quien agradeció toda la ayuda que tuvo la iniciativa.
En esa línea agradeció al intendente de Chos Malal Carlos Lator y al jefe del Escuadrón de Gendarmería, Ezequiel Gariboglio.