La empresa finlandesa Botnia prevé iniciar en el tercer trimestre de este año la producción de pasta de celulosa en territorio uruguayo, aunque en abril próximo comenzará las pruebas utilizando agua del río Uruguay, fronterizo con Argentina, informaron ayer en Montevideo autoridades de la compañía.
Esa fábrica de Botnia que se construye en la ciudad uruguaya de Fray Bentos es motivo de un diferendo entre los gobiernos de Argentina y Uruguay que ya lleva cerca de dos años.
El emprendimento, que involucra una inversión superior a los 1.000 millones de dólares, es resistido por pobladores de Entre Ríos, que temen daños ambientales en la zona. En rechazo al proyecto, mantienen cortado el paso en algunos puentes que interconectan a Uruguay a través del río. Además, el gobierno de Argentina asegura que la instalación de la planta en Fray Bentos, sobre el compartido río Uruguay, sólo contó con el permiso de las autoridades uruguayas, lo que contraviene disposiciones del estatuto que regula el uso de ese curso de agua. Directivos de Botnia detallaron en una conferencia de prensa ofrecida ayer en Montevideo los planes para la puesta en funcionamiento de su planta industrial en Uruguay.
Al principio se realizarán inspecciones mecánicas de las instalaciones, y más adelante se pondrán a prueba los equipos utilizando agua del río. Aclararon que durante esas verificaciones no se emplearán los químicos habitualmente usados para la producción de pasta de celulosa. El agua será devuelta al río Uruguay por los drenajes pluviales de la planta.
Por su parte, los integrantes de la Asamblea Ciudadana Ambiental Gualeguaychú Jorge Fritzler y Alfredo De Angeli, coincidieron ayer en considerar "provocativos y agresivos" los anuncios formulados por Botnia.
Al mismo tiempo, los dirigentes ratificaron que entre el 1 y el 8 de abril se realizará un corte total de los tres puentes al Uruguay. Luego de que Botnia anunciara la inauguración de obras, Fritzler afirmó que "contestaremos a cada una de las agresiones con alguna acción", y remarcó que "a esta altura, tengo que pensar que las provocaciones ya exceden los límites y constituyen algo deliberado".
En el mismo sentido, cuestionó a la empresa Botnia, que "como una provocación, anuncia las pruebas hidráulicas en el río Uruguay en momentos en que estarán reunidos los representantes de los dos gobiernos en España". Por su parte, el presidente de la Federación Agraria de Entre Ríos y asambleísta Alfredo De Angeli, consideró los anuncios como "una agresión más de Botnia". (DyN/DPA)