SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- La intendencia desestimó la realización del relevamiento de tierras fiscales y ociosas para favorecer la construcción de viviendas sociales. La alternativa dependerá de las compras que se puedan efectivizar con aportes externos o fondos propios.
El relevamiento fue reclamado en más de una oportunidad desde el Concejo Municipal para conocer con precisión las alternativas de solución al grave déficit habitacional y poner orden en los registros patrimoniales del municipio.
El subsecretario de Planeamiento, Raúl Ferrari, aseguró a "Río Negro" que "no existen tierras fiscales para el grueso de la problemática habitacional" y reiteró que la solución es la adquisición de terrenos promovida a través del banco.
En esa línea se trabajó para solucionar la problemática de la barda del Ñireco, que demandó la adquisición de 17 hectáreas en el este del ejido y el trazado de un proyecto urbanístico que se encuentra en la etapa final y podría licitarse antes del invierno (foto).
Uno de los factores gravitantes de la problemática habitacional es la sobrevaluación inmobiliaria de las tierrasLos costos prácticamente se ha triplicado en dólares en los últimos cinco años, empujados por la alta demanda para emprendimientos turísticos y viviendas de alta calidad.
La dinámica propia del mercado marginó los eventuales loteos sociales a la periferia sudoeste-sur-sudeste del ejido urbano, bordeada por la ruta de Circunvalación. Ceñida por esta realidad la subsecretaría de Planeamiento está trabajando en la definición de "zonas aptas" donde promover urbanizaciones accesibles para los sectores de menos recursos.
Ferrari evaluó que escasez de tierras tenderá a agravarse en los próximos años y que la solución pasa por re
plantear la filosofía urbanística de los planes sociales promovida por la provincia.
"El planteo de la municipalidad al IPPV es que hay que terminar con la política de una parcela-una vivienda y buscar soluciones intermedias que permitan resolver el problema en menos superficie, porque no hay tierras" explicó.
La mayor apuesta del Ejecutivo es la adquisición de las 106 hectáreas ubicadas en el cruce de la ruta 40 Sur y Circunvalación, que dependen de la decisión política de la Nación. Ferrari y el director de Tierras municipal, Jorge Paolinelli, coinciden al cifrar la solución de fondo al problema habitacional en ese proyecto.
Mientras tanto Planeamiento esta abocado a ultimar el diseño urbanístico de las 17 hectáreas destinadas al demorado traslado de las familias que viven en la zona de riesgo de la barda del Ñireco. El proyecto prevé 248 parcelas distribuidas en 18 manzanas, una reserva fiscal de 3 hectáreas y media hectárea de espacios verdes.
Ferrari informó que el trazado de infraestructura estará listo en la primera quincena y será inmediatamente remitido al IPPV para que pueda licitar las obras antes del invierno. Si no surge ningún contratiempo los trabajo comenzarían al terminar la veda ya que el proyecto cuenta con prioridad de ejecución y recursos asignados por la Nación.
