WASHINGTON (Télam).- La oposición demócrata concretó ayer un nuevo desafío al presidente estadounidense George W. Bush al obtener la aprobación en la Cámara de Representantes de una ley que incluye el retiro de las tropas de Irak en setiembre del 2008, aunque el mandatario aseguró que la vetará.

La iniciativa demócrata logró una ajustada mayoría al ser respaldada por 218 representantes (diputados) y rechazada por otros 212, todos los republicanos y algunos disidentes de demócratas. La ley votada ayer, que aprobó el presupuesto suplementario de 96.000 millones de dólares para sufragar los gastos militares en Irak en el 2007, incluyó una cláusula por la cual las tropas estadounidenses abandonarán ese país en un plazo que vence el 1 de setiembre de 2008.

La norma impone además condiciones de resguardo de la seguridad que deberá cumplir el gobierno iraquí para que las tropas estadounidenses permanezcan en ese país árabe durante un tiempo adicional.

La presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, trabajó activamente durante esta semana para ganar el apoyo a la ley de miembros liberales de su partido que consideraban que la norma permite continuar una guerra inmoral y del sector conservador reticente a fijar un plazo límite para poner fin a la ocupación de Irak. En un nuevo capítulo de la puja de poderes en los Estados Unidos, los demócratas hicieron valer su mayoría en la Cámara baja pero, para convertirse en ley, la propuesta deberá pasar también por el Senado que tiene su propio proyecto que debatirá la semana próxima.

Los analistas consideran improbable que avance en el pleno del Senado sin sufrir cambios, ya que los demócratas no cuentan allí con la mayoría necesaria para imponer su criterio y los republicanos podrán bloquearlo.