NEUQUEN (AN).- Ya se planteó el primer conflicto entre el Consejo de la Magistratura y el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) por el llamado a concurso para seleccionar fiscales adjuntos.
El cuerpo interpreta que el Tribunal, al avanzar con procesos de selección para cubrir puestos del ministerio público, como lo hizo en dos casos, se está excediendo en funciones que la nueva Constitución le asignó al Consejo de la Magistratura.
Por este motivo, el Consejo elevó una queja ante los vocales del TSJ, que aún no respondieron. El consejero Gustavo Olivera dijo, en declaraciones a este diario, que el episodio de los fiscales adjuntos está al borde de un conflicto de poderes. Destacó que es importante resolver esta cuestión porque ya hay 20 cargos para concursar.
Al Consejo de la Magistratura, lo integran representantes del Poder Judicial, de los abogados matriculados y de los bloques legislativos mayoritarios. Su misión es designar jueces y fiscales provinciales.
El funcionamiento del cuerpo ya está en marcha pero avanza con algunos conflictos.
El más resonante es el de María Noemí Díaz que fue nombrada por unanimidad y despedida en votación dividida por pu
blicar una carta de lectores en este diario.
Díaz fue nombrada para dirigir el área de Planificación, Contaduría y Tesorería. La eligieron todos los consejeros el 7 de marzo. Ella se había postulado para la Prosecretaría administrativa pero el puesto se lo dieron al
contador Pablo Villar.
Hace cuatro años, Díaz y Villar tuvieron un conflicto en el ámbito laboral dentro del Estado y la mujer publicó una carta de lectores el 13 de abril de 2004 en este diario.
A Díaz los consejeros vinculados al oficialismo la acusaron de ocultar información en la entrevista previa a la designación y le revocaron la designación en la reunión del 13 de marzo.
Una pregunta
En la última reunión del cuerpo, consejeros independientes del gobierno plantearon que ni Díaz ni a Villar nadie les preguntó si habían tenido un conflicto laboral anteriormente.
Olivera planteó que si a la mujer se la acusaba de ocultar información, el mismo cargo le correspondía a Villar.
El miércoles le preguntaron a Jorge Sommariva, presidente del Consejo, si Villar había planteado que no quería trabajar con Díaz. El también vocal del TSJ respondió: "No lo escuché decir eso".
La contadora Díaz intimó a Sommariva, a que ratifique o rectifique su despido. El cuerpo todavía no le respondió porque decidió tomarse un plazo mayor para elaborar el texto.