SAN ANTONIO OESTE (ASA)- Los despidos de una decena de trabajadores de Alcalis de la Patagonia producidos anteayer en la planta que la firma posee en Punta Delgado, a seis kilómetros de esta ciudad, volvieron a generar incertidumbre en la comunidad acerca del futuro de la actividad industrial que la empresa desarrolla desde hace tres años.

"Esta actitud de Alpat fue como mojarnos la oreja, porque el viernes estuvimos reunidos con los directivos en Buenos Aires para hablar de una posible reestructuración y el lunes cuando este grupo de trabajadores llegó a la planta no los dejaron entrar y les comunicaron que estaban despedidos", expresó Silvio Amulef, secretario general del gremio de los Químicos.

A la finalización de la relación laboral de estos obreros se suma la cancelación de los contratos con algunos trabajadores de seguridad y de limpieza, que eran aportados por empresas que facturaban sus servicios. Además, crecen día a día los comentarios acerca de la falta de pago de Alpat hacia algunos proveedores que ven demorados los cumplimientos en los compromisos asumidos por la firma.

"El viernes cuando estuvimos con el presidente Fabián de Souza -mano derecha de Cristóbal López, un empresario cercano al presidente Néstor Kirchner, al que se le adjudica la participación en casinos, empresas petroleras y de servicios- nos dio a entender que la producción de soda solvay se está llevando a cabo de acuerdo a las expectativas, pero existe preocupación ya que las ventas no son las que se esperaban", informó Amulef.

Según pudo saberse, De Souza habría adjudicado a presiones externas el cierre de algunos mercados, lo que estaría produciendo complicaciones financieras en la empresa que requerirían de una urgente reestructuración del personal. "Nosotros pedimos participación en cualquier modificación que se hiciera en el personal, pero el lunes nos encontramos con esta sorpresa", afirmó el gremialista.

Otra versión, en cambio, da cuenta de que los despedidos serían justamente los integrantes de una lista opositora a la conducción del sindicato. Amulef informó que el viernes próximo mantendrán una nueva asamblea -el lunes por la noche hubo una en la que se decidió iniciar acciones administrativas ante la Delegación local de Trabajo- para definir medidas a seguir. No se descartan manifestaciones en la ciudad o alguna posible huelga para reclamar la reincorporación de los despedidos.