ROMA (DPA) - Jesucristo no caminó sobre el agua, no convirtió agua en vino en las bodas de Caná y Judas no recibió 30 monedas de plata por traicionarlo. De hecho, Judas no quería que Jesucristo fuera capturado. Éstos son sólo algunos ejemplos de los controvertidos argumentos expuestos en el nuevo libro del escritor británico de best-sellers Jeffrey Archer y el profesor Francis J. Maloney, uno de los más importantes expertos en la Biblia de la Iglesia católica. "El Evangelio según Judas por Benjamín Iscariote", publicado en ocho lenguas, fue presentado ayer en Roma, con la presencia de sus dos autores y del rector del Instituto Bíblico Pontificio de Roma, el padre Stephen Pisano.

"No todo lo que aparece en este libro debe ser visto como probable. Pero todo puede ser visto como posible", dijo Maloney. El libro de cien páginas se ve y se siente como un evangelio canónico. Está escrito en verso y publicado con bordes dorados. Y a pesar de que se cree que recibió la silenciosa aprobación del papa Benedicto XVI, sus contenidos asombrarán a los cristianos. El evangelio está escrito desde el punto de vista de Benjamín Iscariote, el imaginario hijo mayor de Judas. La tesis central es que Judas fue un instrumento de un plan divino y, por eso, no culpable personalmente.