SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Los jueces de la Cámara Segunda del Crimen resolvieron absolver por el principio de la duda a un hombre de 64 años que estaba acusado de haber abusado sexualmente de su sobrina, de quien tenía la guarda, pero él siempre insistió en que la menor lo acusó cuando quiso ponerle límites a sus salidas.

Ante el reclamo de la defensa del imputado, la chica declaró ante la audiencia y sostuvo la acusación contra su tío, circunstancia que terminó de convencer al fiscal de Cámara Enrique Sánchez Gavier, quien consideró que estaban probados los hechos imputados y pidió a los jueces de la Cámara Segunda del Crimen que le impongan tres años de prisión en suspenso al acusado, por haber abusado de su sobrina al menos en tres oportunidades.

El procesado tiene su domicilio en un departamento ubicado en el Alto de la ciudad, y en la práctica tenía la guarda de la presunta víctima, que en la actualidad tiene 14 años y es hija de una hermana suya.

La denuncia la presentó a fines de 2005 la madre de la menor en la fiscalía de turno, donde relató que hacía tres años que su hija estaba sufriendo abusos sexuales por parte de su tío, consistentes en tocamientos en sus partes íntimas, pechos y nalgas, besos en la boca y en el cuello, y otras agresiones de contenido sexual. Según la niña, estos hechos habrían ocurrido siempre sin presencia de terceros, dentro de la casa, en la parada del colectivo, o al salir de la iglesia a la que concurrían, pero nunca los había comentado con nadie por no saber en quien podía confiar. Agregó que su tío le prometía comprarle un vestido para ir a la iglesia para convencerla.

En base a la denuncia y a las declaraciones de la menor, la fiscal Mirta Siedlecki formuló la acusación contra el sospechoso por tres hechos puntuales.

El imputado reconoció que tenía la guarda de la menor desde hacía dos años cuando fue denunciado, pero negó los hechos y atribuyó la acusación al conflicto que surgió cuando quiso ponerle límites a sus salidas.

Pese a que ya había declarado ante la instrucción y en presencia del psicólogo forense, la menor volvió a prestar testimonio ante la audiencia, por reclamo de la defensora del acusado, y allí sostuvo la acusación contra su tío.