La Policía brasileña detuvo ayer al ex activista italiano de extrema izquierda, Cesare Battisti, en fuga desde el 2004, confirmó un responsable de las operaciones y de la cooperación internacional de la Policía Federal.
Battisti, de 53 años, cuyo arresto se produjo en cumplimiento de un pedido de extradición de Italia, se encontraba viviendo clandestinamente en Brasil, pues no tenía documentos cuando fue preso en una operación internacional que puso fin a su fuga iniciada en Francia en el 2004, informó la Policía Federal.
Una mujer condujo, sin saberlo, a su detención. "Fue el vector que facilitó su localización en Brasil" informó el jefe de la división de operaciones y cooperación internacional de la Policía Federal, Glorivan Bernardes de Oliveira.
Battisti fue arrestado en la avenida que bordea la playa de Copacabana, en momentos en que se encontró con la francesa Lucy Genevieve Oles, quien había arribado en la madrugada de ayer a Rio, según fuentes de la Policía Federal en Río de Janeiro. Como no tenía documentos, la policía brasileña le tomó las huellas dactilares para verificar su identidad con registros en Italia.
La ciudadana francesa podrá ser convocada para dar su testimonio a la Policía Federal, aunque Oliveira precisó que "no hay cargos contra ella", pues entró legalmente al país y declaró a su ingreso que portaba 9.000 euros. "Vamos a verificar si tiene antecedentes en Francia", dijo la fuente al referirse a Lucy que aparentemente traía dinero para Battisti. Battisti será transferido a Brasilia para aguardar el proceso de extradición que tramitará en el Supremo Tribunal Federal y podrá permanecer detenido en el sector internacional del presidio local de la Papuda hasta que la Corte expida su dictamen sobre el pedido de extradición de la justicia italiana.
(AFP)