SENILLOSA (AN).- El tren de pasajeros volvió una tarde que hacía noche a la vieja estación de Senillosa, 13 años después de la privatización de los ferrocarriles.
"Es paradógico que un tren que mandan de Buenos Aires venga a una estación que hicieron los ingleses a dejar cosas para los mapuches", afirmó ayer el historiador local Jesús Carrasco, un hombre de 50 años que desde el 2000 vive en lo que era el salón de despacho de encomiendas de la vieja terminal ferroviaria. Jesús se emocionó ayer.
Es que a las ocho de la tarde el tren llegó haciendo ruido y con una luz que estalló en la cara de los vecinos quienes respondieron levantando las manos y aplaudiendo al convoy que, además del cargamento solidaria, traía camarógrafos y un maquinista que no entendía semejante alborozo.
El propio intendente Raúl Béttiga se mostró sobre los andenes que hasta hace unos días parecían abandonados al paso del tiempo. Mandó máquinas, obreros, pintores y y operarios de la comuna que le sacaron brillo a la estación que es la casa de Jesús Carrasco.
La carga de los vagones fue íntegramente donada por Rieles Latinoamericanos, una agrupación solidaria que con apoyo de sindicatos y ongs alienta el regreso de los tres a las vías de la Patagonia.
La beneficiaria fue la comunidad Ragiñ Co, una población mapuche asentada desde 1991 a la vera del río Limay, que estos lares muestra una sus mejores caras. Los mapuches tiene pequeñas chacras donde mantienen aves de corral y cultivan hortalizas y verduras.
Pero además de los vagones cerrados y destinados a llevar carga, Rieles Latinoamericanos trajo los de pasajeros donde los vecinos más grandes soñaron nuevos viajes y los más chicos debutaron sobre los pullman venidos a menos.
"Este espacio, toda la estación, ha sido declarado monumento histórico de la ciudad pero no había pasado nada: en cuatro horas se hizo más que en cuatro años", siguió Jesús, docente, historiador y soñador de Senillosa.
El diputado provincial Sergio Farías es uno de los que cree que un tren turístico, por modesto de que sea, podría funcionar perfectamente en estos tiempos en que el turismo se derrama generosamente sobre el mapa argentino y sobre la Patagonia Norte.
Lo llamativo de ayer es que no hubo una organización previa sino que los propios vecinos salieron de sus casas y a caballo del tren fabricaron una tarde distintas en esta localidad que, alguna vez, un subsecretario de Hacienda de Jorge Sobisch definió como inviable".
"Rieles Latinoamericanos promociona el retorno de los tres y a través de un contacto de la intendencia, más precisamente del señor Norberto Chanampa, hace dos semanas se consiguió que venga a Senillosa. Hay un sindicato y otras organizaciones solidarias que consiguieron para la comunidad", afirmó Hugo Pilquiñan, el werken de la comunidad Ragiñ Ko.