El monumento al ingeniero César Cipolletti se levanta en un lugar de privilegio, frente al Parque Rosauer, en un área donde se movilizan miles de personas. Es uno de los principales accesos al casco urbano. Pero las veredas que rodean al emplazamiento de la figura están destrozadas y el perímetro, intransitable. Esto debe ser solucionado porque es casi una falta de respeto al prócer ciudadano.