GUAYAQUIL, Ecuador (AFP) - El gobierno socialista y la oposición miden fuerzas por primera vez este jueves en Guayaquil, la ciudad más populosa del país, con movilizaciones de apoyo al plan de Constituyente del presidente Rafael Correa, y de rechazo al proyecto de dividir la provincia de Guayas, bastión de la derecha.
Mientras, el Tribunal Supremo Electoral (TSE) analiza la posibilidad de destituir a un juez que restituyó temporalmente a 57 congresistas que ese organismo cesó por "obstruir" el proceso de Asamblea Constituyente del gobierno, informó ayer la corte .
El presidente del TSE, Jorge Acosta, dijo que delegados suyos acudieron a una audiencia pública citada por el juzgado civil de la localidad de Rocafuerte (suroeste), que el miércoles admitió un recurso de amparo dejando en suspenso la destitución de los legisladores de la coalición de derecha.
Las calles de Guayaquil fueron tomadas por un centenar de grupos civiles afines a Correa, así como por habitantes y empleados municipales del puerto movilizados por líderes del Partido Social Cristiano (PSC, derecha).
Nuevamente hubo hechos de violencia en torno a este caso político-jurídico.Manifestantes intentaron agredir al menos a tres diputados destituidos que acudieron al juzgado de Rocafuerte, a 230 kilómetros al suroeste de Quito. Uno de los jueces locales, Fabián Dueñas, resolvió acoger el pedido para estudiar la posibilidad de dejar sin efecto la destitución de los 57 diputados por parte del Tribunal Supremo Electoral. Reportes periodísticos desde la zona denunciaron que una turba rechazó la presencia de los diputados, lanzándoles piedras. La policía intervino y usó gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes.
En la capital, se produjeron dos concentraciones en dos puntos cercanos entre sí que fueron vigiladas por 900 policías y reunieron a centenares de personas en Quito y Cuenca (tercera ciudad de Ecuador).