Se trata de la última gran aparición de Vélez y anoche dio la nota. Damián Escudero, clave en la victoria ante Inter, se acomoda a los raros dibujos de Ricardo La Volpe, a tal punto que el volante reconoció que "cuando el equipo defiende, me pide que juegue de 3".
"A mi me gusta entrar siempre por la izquierda del área -agregó- y de esa forma hice los dos goles, pero el técnico también me pide otras cosas".
El hijo del "Pichi" (ex Boca, Central la selección juvenil campeona de 1979), comentó además que cuando "atacamos, Ricardo quiere que vaya por afuera y cuando defendemos que retroceda a marcar, así que me convierto casi en un marcador de punta más. Eso me obliga a realizar un mayor recorrido, pero le sirve al equipo".
El joven volante velezano, candidato de fierro para ir al Mundial de Canadá, dijo que está "muy feliz por el triunfo, ya que era necesario ganar para ir asegurando la clasificación, sobre todo porque el rival es el campeón y estos tres puntos valen oro".
"Y por supuesto que también estoy contento por los goles, ya que siempre es bueno convertir, y más si eso sirve para ganar partidos tan importantes como éste", finalizó el 10 al que también le ordenan que juegue de 3.