SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- El ex gobernador rionegrino Osvaldo Alvarez Guerrero fue internado de urgencia e intervenido quirúrgicamente el domingo por la noche en un sanatorio de la Capital Federal, luego de sufrir un aneurisma en la aorta abdominal.
Cuando lo internaron, a las 20 del domingo, el ex mandatario presentaba un cuadro grave y de dudoso diagnóstico, y después establecieron que su malestar lo ocasionaba el aneurisma que se había manifestado en la aorta abdominal.
La gravedad de su estado obligó a los profesionales a operarlo sin contar con los estudios y análisis previos para realizar ese tipo de intervención, pero no tuvieron otra opción porque la vida del paciente corría serio riesgo.
Hasta anoche el paciente se mantenía en coma farmacológico y seguía muy grave y con la presión arterial muy baja, debido a la intensa hemorragia que padeció, circunstancia que obliga a los profesionales a estabilizarla artificialmente, y a realizarle transfusiones en las próximas horas.
Al momento de sentirse mal, el ex gobernador se encontraba en la casa de uno de sus hijos, en San Miguel del Monte. Lo llevaron al hospital local desde donde directamente lo trasladaron a la capital federal.
La noticia de su estado actual fue trasmitida por su hijo Juan Pablo, que partió el lunes a primera hora para la ciudad de Buenos Aires y lo acompaña en el sanatorio de la Trinidad, situado en la zona de Palermo.
Ayer concurrieron a la clínica donde está internado, el ex gobernador Horacio Massaccesi y Ricardo Illia (hijo), mientras que se interesaron por su salud el ex presidente Raúl Alfonsín, el vicegobernador rionegrino, Mario de Rege y diputados nacionales del radicalismo.
Alvarez Guerrero, columnista de este diario, tiene 66 años, fue diputado nacional por la UCR en 1973, con apenas 33 años, pero el golpe militar del 24 de marzo de 1976 no le permitió cumplir su mandato. Volvió a ocupar ese cargo en el Congreso en 1987, cuando dejó la gobernación de Río Negro en manos de su sucesor, Horacio Massaccesi, y en 1991 fue elegido presidente de la Convención Nacional de su partido, cargo que abandonó en 1994, luego de manifestar su pensamiento crítico hacia el Pacto de Olivos. Hace varios años que Osvaldo Alvarez Guerrero reside en Buenos Aires.
