BUENOS AIRES.- Ayer fue otro martes nefasto para los mercados bursátiles mundiales, en particular Europeos y el de Nueva York, donde se produjeron fuertes bajas por temores a que el estallido la burbuja inmobiliaria termine afectando a toda su economía.
Los diferentes índices de Wall Street cayeron todos alrededor de un 2% y esta vez no puede achacarse nada de ello a algún "efecto China", como algunos especularon cuando una semana atrás el gobierno de Beijing decidió ajustar su propia burbuja bursátil y provocó una caída del orden del 9% en Shanghai, la que arrastró a las del Primer Mundo y su periferia.
"Cuando los operadores están cada vez más preocupados por el ritmo de crecimiento, esta cifra más baja que lo previsto incrementó los temores sobre la desaceleración de la economía estadounidense", señalaron analistas de Briefing.com. Los índices aceleraron su caída luego de la publicación de un estudio de la asociación de banqueros hipotecarios ("Mortgage Bankers Association"), que aumentó las inquietudes de los inversores, que temen también que las dificultades del sector de préstamos de "alto riesgo" alcancen a otras empresas financieras.
El punto central, de cara al futuro, es como se resolverá el enorme endeudamiento del ciudadano medio estadounidense. Algo sobre lo que se han venido pronunciando numerosos especialistas los que, centralmente, discrepan entre sí, sobre si habrá una maxi corrección o un proceso de suave de ajuste.
En general se observa una coincidencia en que la economía de los Estados Unidos se apresta a entrar en una etapa de ajuste si no es que ya ha comenzado. Alan Greenspan, el anterior titular de la Reserva Federal, ocho días atrás anunció que se avecinaba una recesión.
Las Bolsas europeas de Madrid, París y Londres ya habían preanunciado, por razones horarias, lo que fue la baja en EE. UU., aunque algo más atenuadas, con un 1,2% en los tres casos, y en Tokio había comenzado la jornada con una merma del 0,7%. Pero esta vez las Bolsas chinas no cayeron sino que, por el contrario, mostraron que una vez que se hicieron sentir las medidas de las autoridades de Beijing, el camino de los buenos negocios retomó su línea ascendente, dentro de niveles moderados: la Bolsa de Shanghai trepó un 0,33% y la de Shenzhen un 1,16%.
Mientras, la Bolsa de Valores de Buenos Aires experimentó una fuerte caída del 3,76%, interrumpiendo una tendencia alcista. El índice Merval cayó hasta los 1.990,35 puntos. El dólar bajó un centavo y cerró a 3,07 pesos para la compra y a 3,11 para la venta.
