Ayer, Néstor Gorosito dio la cara luego de su salida como entrenador de Rosario Central y sostuvo que sabía que su alejamiento del club podía ocurrir en cualquier momento debido a las presiones que hay.
"Fue una etapa buena, pero esto se sabía que podía suceder por las fuertes presiones que hay en el club y yo y mi cuerpo técnico no tranzamos con nadie", declaró Gorosito en conferencia de prensa en el Complejo Parque España que se ubica sobre la costa del río Paraná.
Pipo llegó a Central en agosto último para reemplazar a Leonardo Astrada en el torneo Apertura 2006. Rosario Central no tuvo un buen comienzo de Clausura 2007 y, después de la pálida derrota del viernes ante Independiente, los dirigentes decidieron que Gorosito se aleje del club.
"Fue un proceso lógico, los dirigentes estaban presionados y pensaron que lo mejor para el club era que me fuera. Lo acepto y le agradezco al plantel por sus ganas de trabajar y al público por el apoyo".
Gorosito afirmó además que el "el fusible que primero salta es el del técnico, después vendrán el de los dirigentes y por último los jugadores. La intención mía era de seguir, pero no quiero perjudicar al grupo y lo mejor será tener una salida consensuada", concluyó el conductor.