Les costó demasiado, pero lo lograron. Independiente y Racing ganaron por primera vez en el Clausura durante el último fin de semana. Entonces, una brisa de aire fresco recorrió Avellaneda y Jorge Burruchaga y Reinaldo, los respectivos entrenadores, pudieron respirar aliviados, al menos hasta el próximo fin de semana.
Uno, el del 'Rojo', estuvo cerca de renunciar. Dicen que lo hizo tras la caída ante Banfield (2-1), hace diez días. Pero no. Resistió y el viernes pasado su equipo derrotó a Rosario Central (2-0).
El otro, el de la 'Academia', se enfrentó a un golpe de vestuario encabezado por el principal símbolo racinguista de estos tiempos, Claudio López. El y buena parte de sus compañeros le pidieron al entrenador que revea la decisión de separar a Francisco Maciel. Pero tampoco. Respondió que era una "decisión tomada", se mantuvo fiel a sus estilo y el domingo su equipo derrotó a Lanús (2-1).
Respaldo e ilusiones
Después de varias semanas en el ojo de la tormenta, Julio Comprada, presidente de Independiente, aprovechó la paz del primer triunfo para renovarle el respaldo. "Con Burruchaga se habló de inestabilidad y en ningún momento la hubo. Siempre tuvo el respaldo nuestro". "
Confío en el plantel y el cuerpo técnico. Independiente tiene un jugador por línea que son de los mejor del fútbol ar
gentino. Ustari, Gioda, Montenegro y Denis, que si bien hoy no está pasando un buen momento es uno de los cinco mejores delanteros del fútbol argentino. Tiene el arco cerrado, pero es distinto".
En la semana después del primer triunfo, Maximiliano Moralez, autor del golazo de los tres puntos 'académicos', comentó: "En estos momentos de crisis lo importante es ganar. Sabemos que con Lanús no hicimos un gran partido pero era fundamental llevarnos los tres puntos. Ahora tenemos que pensar en el partido del domingo, con Argentinos, porque necesitamos seguir consiguiendo resultados porque el torneo recién empieza".