SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- El legislador de Encuentro, Fabián Gatti, aseguró ayer que la AFIP volvió a detectar un presunto fraude en la empresa de tecnología rionegrina Altec, mediante la utilización de facturas apócrifas en los balances que llegan hasta julio del 2004.

Según el legislador, la Administración Federal de Ingresos Públicos ya radicó la correspondiente denuncia penal tributaria ante el juzgado Federal de Bariloche, información que no fue confirmada por el juez Leónidas Moldes.

"Hay una nueva inspección por parte de AFIP, que comprende períodos hasta julio de 2004, donde nuevamente se detecta este modus operandi de Altec que pasa por confeccionar facturas truchas para desviar dinero hacia alguna caja que algún día sabremos quién la tiene", sostuvo Gatti en diálogo con "Río Negro".

De confirmarse la denuncia, las acciones penales alcanzarían al actual directorio, encabezado por Graciela Di Biase, que asumió en agosto de 2004 pero tuvo la responsabilidad de firmar los balances de los dos ejercicios anteriores.

Una carga pesada, ya que la rendición de cuentas correspondiente al período 2002-2003 fue el centro del escándalo que precipitó la gestión de su antecesor, Adrián Brussino, quien denunció la existencia de gastos injustificables superiores a los 700.000 pesos.

El balance quedó bajo la auditoría del contador José Lobera. El 3 de agosto de 2004 Di Biase asumió consciente de la responsabilidad que implicaba afrontar el demorado documento contable y aclaró a este diario que "el informe de esa auditoría, con las observaciones que correspondan, se adjuntará cuando se apruebe el balance y yo tenga que firmarlo".

Los balances observados por la AFIP habrían repetido la mecánica que dio origen a la megacausa que investiga el juez de instrucción penal, Miguel Gaimaro Pozzi, en la que fueron procesados recientemente el ex presidente de la sociedad estatal, Guillermo Campbel, y el ex directivo Haroldo Lezcano. Ambos fueron considerados "prima facie co-autores penalmente responsables del delito de fraude a la administración pública" en dos casos que rondan el 1,5 millón de pesos.

Gatti anticipó la denuncia pública a la judicial -apurado por la agenda electoral que puso a la empresa de tecnología en el ojo de la tormenta- y no pudo brindar precisiones sobre los montos comprometidos en la eventual defraudación ni los funcionarios involucrados en la denuncia.

No obstante sostuvo que "la Afip detectó la utilización de facturas apócrifas, intimó a