El quinto capítulo del Clausura fue el punto final para la serie negra de Independiente. El equipo de Jorge Burruchaga logró la primera victoria en el torneo al superar en el 'Cilindro' de Avellaneda a Rosario Central por 2 a 0.
Independiente salió decidido a mostrar su mejor versión, esa que apenas entregó en contadas ocasiones en lo que va del Clausura.
'Burru' paró a Daniel Montenegro delante de la dupla de ataque, que esta vez estuvo formada por Ismael Sosa y el colombiano José Moreno. Detrás del 'Rolfi', el tridente de apoyo formado por Herrón, Pusineri y Fredes, se desdoblaba para combatir, y a la vez jugar.
El esfuerzo le significó al 'Rojo' mandar en el partido. Tuvo mayores oportunidades que Central en la etapa inicial y justificó la ventaja parcial.
Primero avisó Fredes con un cabezazo. Después fue Moreno el que tuvo la chance (remató desviado por poco) y presagió la apertura del marcador. Cuando se cumplían 21 minutos, Montenegro habilitó al colombiano, que no dudó ante Alvarez y con un zurdazo bajo, puso el 1-0.
El 'Rojo' pudo haber aumentado desde los pies de Montenegro. Llegando a la media hora, un potente derechazo del 'Rolfi' se perdió apenas afuera. Diez más tarde, fue Alvarez el que le ahogó el grito.
La tónica no varió demasiado en el complemento. Independiente esta vez, no perdió la concentración y pudo mantener la ventaja, gracias a una última línea que estuvo despierta, ante las incursiones de Zelaya primero y de Alemanno después.
Los hinchas 'rojos' sufrían porque su equipo dilapidaba situaciones y no lo liquidaba. Pero Central se quedó con diez por la expulsión del 'Kily' González, y el local aprovechó.
Cuando el partido se iba, el 'Rolfi' metió otra asistencia, esta vez para Fredes, que marcó el ansiado segundo gol para que el grito contenido, que ya llevaba cinco fechas, fuera liberado. El 'Rojo' ganó, rompió el maleficio y Burruchaga respira.