América Latina celebró un nuevo Día Internacional de la Mujer en medio de sus arcaicos problemas que giran en torno a la discriminación, la pobreza y la violencia intrafamiliar. Según cifras de la Cepal, en la región hay unos 200 millones de pobres, de los cuales la mayoría son mujeres.

En Argentina se supo que más de la mitad de las empresas no emplean a ninguna mujer en puestos gerenciales, lo que ubica al país debajo del promedio mundial. La encuesta sostiene que 47 por ciento de las empresas cuentan con "alguna mujer" en puestos ejecutivos, 23 por ciento emplea a "sólo una", 16 por ciento a dos, y apenas 8 por ciento a tres o más personas de sexo femenino. El relevamiento a cargo de la consultora Grant Thorton indicó que Argentina se ubica por debajo del promedio global, que se ubicó en 59 por ciento. El estudio revela que 53 por ciento de las empresas dijeron "no" emplear a "ninguna mujer" en puestos gerenciales. Los cargos ejecutivos de las empresas en Argentina están compuestos en promedio por 5,57 personas, de los cuales sólo una es mujer (0,91 en promedio), equivalente a 16 por ciento, mucho menor al 42 por ciento de Brasil y al 20 de México.

En Chile el día fue celebrado con un acto liderado por la presidenta Michelle Bachelet, cuyo gabinete es paritario. Habló bajo un cartel que decía "La igualdad no es un sueño".

En México el presidente Felipe Calderón firmó un Acuerdo Nacional para la Igualdad entre Mujeres y Hombres para promover un trato similar entre géneros en los poderes del Estado, mientras 18.000 mujeres marchaban por las calles de la capital para presionar por la liberación de una activista femenina en el estado central de Querétaro.

En El Salvador unas 2.000 mujeres que portaban carteles con leyendas contra la violencia se reunieron en la Plaza El Salvador del Mundo para demandar al gobierno del presidente Tony Saca políticas antidiscriminación.

Un millar de mujeres marchó en Guatemala para exigir los derechos de la mujer y el fin de la violencia contra la mujer, mientras 15 se desnudaron para mostrar una gran letra pintada en sus cuerpos que formaban la palabra ``este es mi cuerpo''.

En Nicaragua el Movimiento Autónomo de Mujeres protestó frente al edificio del legislativo y criticó el apoyó de los diputados del Frente Sandinista de Liberación a la penalización del aborto terapéutico. (AP y DyN)