Miércoles 07 de Marzo de 2007 Edicion impresa pag. 36 > Sociedad
Ingleses en la invasión a Patagones

Declarada la guerra a las Provincias Unidas del Río de la Plata por el emperador Pedro I de Brasil en diciembre de 1825 el puerto marítimo-fluvial de Carmen de Patagones pasó a tener singular protagonismo en la "guerra del corso", convirtiéndose en seguro refugio para corsarios y presas de los mismos. Días de esplendor para el pequeño poblado que surgiera casi 50 años antes de la mano de Francisco de Viedma y Narváez y sus españoles. Bebidas, géneros, platería, alimentos, lozas y hasta pianos y otros enseres engrosaron hogares maragatos producto de abordajes en alta mar. Bloqueo brasileño en el río de La Plata. Junto con el "Salado", Patagones pasó a ser objetivo a anular por los imperiales, proyecto viable sólo por mar y remontando el río Negro pues a pocos kilómetros de su desembocadura estaba el Fuerte del Carmen epicentro de la incipiente población. A fines de febrero de 1827 comenzó el intento invasor con aproximaciones para embocar el Negro salvando su famosa "barra".

No vamos a narrar los pormenores de aquella famosa invasión -creemos- en la Patagonia, aunque algunas historias e historiadores le hayan dedicado pocas líneas. Es propósito de la presente, es recordar algunos actores ingleses que integraron aquel cuadro ubicado en la historia como "Invasión o defensa de Patagones", "Combate del Cerro de la Caballada" y hasta "La Gesta de Patagones". Fueron muchos ingleses con relación a la población española, criolla, mulatos, morenos y de otras nacionalidades. Cuatro fueron las naves que usaron los invasores: corbeta Itaparica, bergantín-goleta Escudero, goleta Constancia y similar Duquesa de Goyaz que dejó sus maderas y cañones en los bancos de la "barra", más algunos comandados por el inglés James Shepherd que había actuado en la escuadra de Lord Cochrane apoyando la campaña de San Martín al Perú y luego pasó a la marina brasileña, destinado a la fuerza que operaba en el río de la Plata, siendo capitán de fragata y luego se lo nombró comandante de la expedición a Patagones. Su segundo, Guillermo Eyre, también inglés, comandó la Itaparica. Shepherd fue muerto en el combate del Cerro de la Caballada lo que produjo el desbande y rendición de sus hombres.

Entre los marinos defensores sobresalió Santiago Jorge Bynon nacido en Gran Bretaña en 1798 (país de Gales). También había actuado en Chile, llegó al país contratado por el gobierno para actuar contra Brasil comandando la "Chacabuco". Reparando la nave lo sorprendió la invasión pasando a dirigir la "Bella Flor", propiedad de Jaime Harris. Harris piloteó la goleta "Emperatriz". Este ma

rino inglés, nacido en Londres en 1797, actuó con Bouchard en la fragata "La Argentina" y obtuvo patente de corso. Había en el puerto maragato otras naves corsarias comandadas por no ingleses que también participaron contra los invasores y en la boca del río estaba "el práctico de la barra" Guillermo White, irlandés, en el puesto desde 1823 que nada pudo hacer para evitar la entrada de las naves brasileñas pese a los cañones que allí emplazó Bynon, lugar hoy conocido como "El estacionario". De afinidad inglesa, aunque norteamericano, Juan Bautista Thorne -saliendo un poco del motivo de ésta nota- no se lo puede olvidar por su destacada actuación marinera en aquellos episodios de 1827 y según un autor fue "el primer marino argentino que saltó sobre la cubierta de la Itaparica y arrió, prisionera, su bandera de combate".

La sangre inglesa anduvo en aquellas acciones guerreras que culminaron el 7 de marzo de 1827 con el triunfo de los pobladores del Fuerte: milicianos, negros libres, extranjeros, gauchos, mulatos, civiles y hasta mujeres y niños disfrazados de soldados, verdadera reacción popular, victoria en la que hicieron buen papel los británicos.

Pero hubo más ingleses inmersos en el anonimato y el elogio del comandante del Fuerte del Carmen Martín Lacarra a Bynon en nota al ministro de Guerra y Marina (20/3/1827): "Los comandantes de los corsarios y sus tripulaciones han mostrado igual interés... pero como en todos estos casos siempre hay uno que se distinga... éste ha sido el comandante de 'Chacabuco', D. Santiago J. Bynon... es debido el triunfo sobre los buques enemigos". En comunicación de 26 de marzo dirigida al citado ministro, Bynon detallaba "la clase y armamento de buques apresados al enemigo por la fuerza de mi mando el 7 de Marzo, correspondiente a "Itaparica", "Escudero" y "Constancia", opinando que los "cascos, velamen y maniobra, con alguna corta refacción, quedan de buen servicio", estimando que si la superioridad aprobaba que siguieran navegando se podía "armar estos buques, en este punto se puede hacerlo con mayor facilidad que en cualquier otro, pues existen aquí las tripulaciones, entre ellos 200 ingleses, los cuales han ofrecido sus servicios a la nación; de modo que sólo faltan los gefes y algunos oficiales, para quedar tripulados dichos buques" (sic).

Sin duda, en las naves brasileñas y de corsarios sus tripulaciones estaban integradas por gran cantidad de ingleses que en parte se ofrecieron al gobierno argentino. Fueron los anónimos ingleses de ambos bandos en aquellos memorables días de febrero y marzo de 1827, sin registro de sus nombres. También tuvieron cabida en la tan especial página de la historia patagónica.

 

(*) Bibliografía principal y fuentes: Biedma, JJ. Apuntes, 1887 y Crónica 1905. García Enciso, IJ. La gesta, 1968. Carranza, AJ. Campañas, IV, 1962. Caillet-Bois, T. Los corsarios, 1935. Destéfani, LH. Manual, 1975. Rivero de Gayone, MC. Reminiscencias, 1927. Pesatti, PO. Diario, 2005. Laría, SC. Guerra del corso, 1961. Ratto, HR. Hombres 1941. Historia Marítima Argentina, (varios), 1988. Pérez Morando, H. La invasión (RN) 1993, La Familia Mitre, 1998 y Extranjeros, 2002. Mitre, A. Carta, 1827. Biblioteca DEHN. Biblioteca Patagónica, del Museo Tello (V) y otros.

 

HECTOR PEREZ MORANDO (*)

Especial para "Río Negro·

(*) Periodista. Investigador historia patagónica.

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