ZAPALA (AZ).- La implementación del programa "volver a la mesa familiar" despertó cuestionamientos de parte del Concejo Deliberante de esta ciudad. El edil, Oreste González criticó "los escasos víveres secos" que recibían varias familias con niños de bajo peso al tiempo que calificó como una "falta de respeto" el aporte adicional de 50 pesos mensuales en tickets para la compra de carne y verduras.
La respuesta oficial no se hizo esperar y el subsecretario de Desarrollo Social, Sergio Tenaglia, contestó que los valores del programa "surgen de un intenso trabajo técnico mediante el cual siempre se tuvo como premisa la correcta alimentación de las personas que reciben este beneficio".
Además, ironizó sobre el pronunciamiento de González al advertir que "parece que el concejal cree que este programa sale de alguna improvisación o de una charla de café".
La polémica se instaló cuando el edil del bloque Comunidad le solicitó al intendente Raúl Podestá la urgente intervención frente a la "grave situación" que atraviesan los beneficiarios del programa "volver a la mesa familiar".
González citó el caso de un grupo de familias del Cañadón Este que estarían recibiendo escasa cantidad de mercadería y un bono de 50 pesos mensuales.
"Para una familia tipo es una falta de respeto ya que mínimamente para comprar carne y verduras se necesitan alrededor de 200 pesos", sostuvo el legislador.
Desde la subsecretaría de Desarrollo Social se elaboró un informe para responder a la solicitud donde consta un documento médico oficial que revela el porcentaje del aporte nutricional que reciben los beneficiarios del programa.