BUENOS AIRES (Télam).- Familiares de la veterinaria y su hija de tres años que murieron carbonizadas luego que su automóvil fuera chocado por el conducido por Sebastián Cabello, solicitaron que se cierre la etapa de pruebas en la causa civil para que se pueda dictar sentencia respecto a la demanda de 2.000.000 de pesos promovida contra el joven.
Fuentes judiciales informaron ayer que el pedido fue formulado a la jueza en lo civil Marcela Eiff por el abogado Marcelo Parrilli, representante legal de Sergio Rosales, cónyuge de Celia González Carman y padre de Vanina Rosales.
La mujer y la niña fallecieron el 30 de agosto de 1999 en la avenida Udaondo, en el barrio porteño de Núñez, cuando el automóvil conducido por Cabello embistió al de la veterinaria, que estaba detenido. La causa penal contra Cabello, de 26 años, concluyó 14 de noviembre último, cuando la Corte Suprema de Justicia rechazó recursos extraordinarios del viudo y del fiscal Juan Romero Victorica y dejó firme un fallo de la Cámara Nacional de Casación Penal que benefició al condenado.
La Sala III de la Cámara redujo la pena dictada por un tribunal oral e impuso a Cabello tres años de prisión -en suspenso- y 10 de inhabilitación para conducir vehículos, como autor del delito de "homicidio culposo".