Si bien los cajeros automáticos que se instalan en aquellos lugares donde no existen entidades bancarias son los denominados "dispensadores", es decir que no reciben depósitos, redundan en beneficios ante la falta bancos.

El nuevo contrato firmado por la provincia con el Banco Patagonia SA ratifica la modalidad de "bancarización" de los fondos de la administración pública y de los trabajadores del Estado. El artículo 3º señala que "La provincia se compromete a mantener en el banco, en cuenta corriente y/o caja de ahorro, y/o a plazo , y/o cualquier otra modalidad, los fondos de la administración Pública. Asimismo, y siempre que la provincia se lo requiera expresamente, el banco se compromete a realizar el diseño y negociación de las operaciones financieras de mercado de capitales que la misma realice, las que deberán ser llevadas a cabo en condiciones de mercados". Con un cajero dispensador y descontando los fondos de su cuenta, un cliente puede cobrar el sueldo, pagar tarjetas de créditos, servicios de luz, agua, gas y teléfonos, impuestos provinciales, seguros de vida y de retiro, obras sociales, AFJP y realizar transferencias entre cuentas.