Chicago había dejado de ser aquel equipo que sorprendió en el Clausura.
Las duras caídas por 3-0 ante Argentinos y 4-0 con Arsenal, luego del empate en el debut con Racing 1 a 1, fueron motivos más que suficientes para los dirigentes del 'Torito' para que Rodolfo Motta deje de ser el entrenador.
Claro que en el medio también pesaron los "problemas de salud" por parte del entrenador. Pero en las últimas horas del día se supo, que los directivos del club de Mataderos aprovecharon los inconvenientes de salud de Motta para bajarle el pulgar.
El mismo DT lo confirmó, horas después de dejar de ser el entrenador de Chicago."Yo quería seguir. Le pedí a los dirigentes que me esperaran un chequeo médico que me tengo que hacer y en un par de días más estaba otra vez con todo. Pero bueno, ellos me comentaron que era momento de un cambio".
Motta manifestó su disconformidad con la manera en la que se alejó de su cargo y, sin nombrarlo, responsabilizó al presidente Antonio Filomeno, de la drástica decisión. Enseguida ensayó una reflexión y dijo: "Vamos a ver cómo forma el domingo el equipo", en referencia a la posible inclusión de Lucio Filomeno, hijo del presidente, como titular en el choque ante Quilmes.
El interino reemplazante será otro hombre de la casa como Hugo Zerr, quien ya estuvo tres veces al frente del primer equipo, consiguiendo en 1991 el ascenso al entonces Nacional B.
Ya quedó establecido que Zerr será el entrenador hasta el final del Clausura y contará como ayudante de campo con el ex arquero Jorge Trippichio.