CUTRAL CO (ACC). - La policía reprimió ayer con gases lacrimógenos y balas de goma a un grupo de desocupados del gremio de la UOCRA que, tras una larga caminata, reclamaba a la empresa petrolera Repsol que los interceda para que las contratistas los incorporen para trabajar en el yacimiento de Loma de la Lata.

La represión comenzó alrededor de las 19:30 y duró apenas unos minutos pues los desocupados se dispersaron rápidamente. Por la tarde, el secretario general de los albañiles Julio Ojeda estuvo reunido en Neuquén con autoridades de la Unidad de Negocios Oeste de Repsol-YPF.

Los trabajadores de la construcción permanecían a unos 20 kilómetros del ingreso al yacimiento Loma de la Lata cuando la Policía los corrió a fuerza bombas de gas lacrimógeno, sin que se produjeran heridos. Habían arribado al lugar caminando, el miércoles. Es que antes les retuvieran los micros en que se desplazaron desde Cutral Co hasta el dique Portezuelo Grande. Allí, efectivos de Gendarmería Nacional les ordenaron frenar el micro.

El campamento estaba en calma y con expectativas, pues en Neuquén Ojeda gestionó el diálogo con los representantes de la compañía española. En la sede del sindicato se llevaron adelante las conversaciones que se extendieron hasta las 15, cuando se dispuso un cuarto intermedio hasta las 19.

"Se barajaron algunos aspectos. Necesitarían un listado y se comprometería para más adelante. Pero ahora están analizando alguna propuesta para paliar la situación de los compañeros", dijo telefónicamente Ojeda a "Río Negro". El dirigente es un hombre íntimamente ligado al Movimiento Popular Neuquino y estuvo muy cerca del gobernador Jorge Sobisch hasta que en las internas de su partido se sumó las huestes de

Jorge Sapag.

Una vez que contaran con la propuesta, Ojeda y los representantes de los desocupados viajaron a Loma de la Lata para transmitir las novedades a los manifestantes que aguardaban desde el día anterior.

"La preocupación es muy grande porque los compañeros ven que ya empiezan las clases, tienen que comprar la ropa y los útiles para sus hijos y no tienen posibilidades de entrar a trabajar", acotó Ojeda. Pasadas las 20 viajaron hacia el yacimiento.

El secretario del gremio de los albañiles se mostró preocupado por las condiciones en que estaban los manifestantes teniendo en cuenta que ya llevaban más de un día en el campo.

"Hay que lamentar el desgaste físico. Hoy (por ayer) socorrimos a un muchacho con una ambulancia porque estaba descompensado así que esperamos tener una respuesta viable", destacó el dirigente.

El grupo de desocupados partió desde Cutral Co el miércoles por la mañana. Si bien hicieron unos kilómetros a pie, alrededor del mediodía consiguieron dos micros que los trasladaban hasta el yacimiento, al igual que la comida. Partieron sin inconvenientes pero cuando pasaron el puesto de control de Gendarmería Nacional las unidades no pudieron seguir.

Al parecer, algún inconveniente con la documentación les impidió continuar y los micros fueron retenidos en el sitio.

Sin embargo, los manifestantes no desistieron y resolvieron seguir . Al llegar a la ruta 51 que lleva al yacimiento, lograron caminar unos diez kilómetros aproximadamente.

Allí, un fuerte operativo policial, con los uniformados pertrechados con los equipos antidisturbios evitó que continuarán hasta las instalaciones, donde pretendían manifestarse. Permanecieron allí hasta que la Policía los desalojó poco después de las 19.