ROCA.- Los empleados de las clínicas y sanatorios nucleados en ATSA se movilizaron hoy hasta las sedes Ipross y PAMI para reclamar la cancelación de las deudas que estos organismos mantienen con las entidades privadas, que ponen en peligro su estabilidad laboral. Los trabajadores que temen por el futuro incierto de sus fuentes de trabajo y advierten con tomar medidas de fuerza que podrían llevar a un paráte general.
Las pasivos que mantiene Salud Pública, Ipross y Pami sumado al aumento otorgado a los trabajadores del sector que ronda el 48 % (19% de incremento al salario, 25% por zona desfavorable y unos puntos más por distintos conceptos) han puesto a las empresas de medicina privada en una situación crítica donde algunas ya anunciaron cierres y otras están al borde de hacerlo, se explicó.
El pedido de los trabajadores apunta al Estado para que haga frente a la situación porque, según el secretario general del gremio, Esteban Romero, “se supone que hay presupuesto pero no llega adonde tiene que llegar”. En la próxima asamblea del gremio se estudiará la posibilidad de realizar un paro provincial que puede poner en jaque la atención a la salud de los rionegrinos.
Roberto Bernardini, referente de la Federación de Clínicas de Río Negro y socio gerente del Sanatorio Juan XXIII, indicó que la situación es crítica.
Actualmente la masa salarial que enfrenta en particular su institución -teniendo en cuenta que desde enero se incorporaron los aumentos mencionados- llega al 70% del presupuesto total.
En una reunión reciente con el Ministro de Trabajo de la Nación, Carlos Tomada, la Federación de Clínicas pudo saber que el gobierno nacional tiene previsto el financiamiento de ese 19% que, sumado a un aumento de cápita del Pami y un incremento de los aranceles de las obras sociales sindicales, permitiría a las instituciones médicas hacer frente al aumento salarial.
No obstante, Bernardini señaló que por ahora no ocurrió nada de esto. Por este motivo, desde el sector patronal, Bernardini indicó que apoyan la medida de los trabajadores porque “ellos han entendido que no podemos hacer frente a los costos si esta situación continúa”.
Fuente: (AR).