Amillia Taylor, la beba más prematura del mundo, nacida a las 21 semanas y seis días de gestación, no saldrá hoy como estaba previsto del hospital de Miami, en donde nació hace cuatro meses, y permanecerá varios días más en la clínica, dijo una portavoz de la institución. "Van a retenerla unos días más. Decidieron dejarla ir durante la semana, quieren observarla un par de días", dijo una portavoz del hospital. Amillia estuvo internada en cuidados intensivos desde su nacimiento en octubre pasado. La beba ahora pesa 1,8 kilos, pero cuando nació el 24 de octubre pesó tan sólo 280 gramos y midió 24 centímetros.