ROCA (AR).- Luego de los incesantes reclamos ante funcionarios municipales y provinciales, los vecinos del barrio El Petróleo decidieron presentar un recurso de amparo, cansados de sufrir la presencia de un olor nauseabundo que emana de la planta depuradora de líquidos cloacales.

La situación que tiene a maltraer a un treintena de familias que residen a la vera de la ruta 22 y a pocos kilómetros del ejido urbano, parece no tener solución.

"A veces no podemos ni comer y tenemos que cerrar todas las ventanas porque el olor es terrible, no se puede ni respirar", señaló indignada Mónica Casanova, referente de la barriada.

En tanto, indicó que muchas veces los chicos tienen que permanecer encerrados porque por el aire circulan diferentes infecciones. "Los nenes se descomponen y no se saben las causas", ilustró la mujer.

A las dos piletas llegan miles de litros de desechos diariamente, que provienen de todos los hogares de Roca.

Sin embargo, el nivel que presentan las lagunas parece amenazar con un posible desborde, ya que permanentemente los líquidos que son tratados se enviarían al río Negro y a veces el sistema no funciona bien.

Ante la angustiante problemática que los aqueja desde los principios del asentamiento, los residentes recurrieron a la dirección de Medio Ambiente de Roca, desde donde se le sugirió a ARSA la colocación de cortinas de árboles entre la planta y el barrio para frenar los olores. Sin embargo "no nos dieron respuestas certeras", se indicó.

Por ello, aseguró que en breve se formalizará la acción expedita en la que se pedirá inicialmente que se retiren las piletas del lugar, o en todo caso se diseñe una estrategia ambiental a fin de evitar que se siga contaminando.

La presentación tiene como antecedente el recurso de amparo interpuesto a fin de 2005, cuando un grupo de familias cansadas de no contar con agua potable y a fin de que se reanudaran los trabajos de conexión acudieron a la justicia. En esa oportunidad, según se consignó, se logró que las tareas se concluyeran en tres meses.