ALLEN (AA).- Un muy ajetreado fin de semana tuvo la Policía en esta ciudad tras sucederse tres asaltos a mano armada en un radio de pocas cuadras en el centro de Allen. Uno de los hechos tuvo como blanco un local de ventas de telefonía celular, otro ocurrió en una vivienda particular -donde una mujer fue reducida a golpes- y el último afectó al propietario de un taller de reparación de equipos de frío.

La seguidilla de hechos ocurrió el sábado por la mañana y tuvo a maltraer a los efectivos de la localidad. El primero de los robos tuvo lugar, alrededor de las 7.40, en un local de venta de teléfonos celulares ubicado sobre calle Orell.

Según se informó, dos sujetos se presentaron simulando ser clientes, por lo cual un empleado les abrió la puerta. Una vez que estuvieron dentro del local pidieron hablar con el dueño y cuando éste se acercó, lo encañonaron y lo dejaron encerrado en la parte posterior del comercio. Luego sustrajeron varios celulares y se dieron a la fuga.

Casi dos horas después ocurrió otro asalto, también en el casco céntrico. En esta oportunidad fue en una vivienda de un conocido comerciante, según apuntaron fuentes policiales, ubicada sobre calle Irigoyen.

También en este caso dos individuos sorprendieron a una mujer que limpiaba en el frente de la casa, la obligaron a ingresar y luego la maniataron. Los delincuentes comenzaron rápidamente a revolver todas las dependencias en busca de dinero, pero en ese momento llegó la dueña de casa y al ver las puertas abiertas y a nadie cerca, comenzó a gritar pidiendo ayuda.

Mientras ocurría esto, la empleada reducida por los maleantes logró desatarse y corrió para buscar ayuda. Sin embargo, uno de los delincuentes advirtió su maniobra y logró alcanzarla y la golpeó fuertemente en el rostro. La mujer sufrió una herida cortante a la altura de un ojo y los sujetos lograron escapar aunque no habrían logrado llevarse nada de valor.

Finalmente, el tercer hecho -que los investigadores no descartan que haya sido cometido por los mismos asaltantes- ocurrió a los pocos minutos y a escasas tres cuadras de allí.

También en este caso dos delincuentes armados redujeron al dueño de un taller de reparaciones de equipo de frío y le robaron un Renault 12, en el cual escaparon, y dos teléfonos celulares.

Ambos sujetos serían jóvenes, de entre 18 y 25 años.

La Policía montó un operativo en las inmediaciones pero, según pudo saberse ayer, no hubo novedades sobre los asaltantes ni los elementos sustraídos, incluido el vehículo.