En un cambio brusco de temperatura el termómetro descendió hasta los 2 grados bajo cero y la cordillera se pintó de blanco en pleno mes de febrero.
En la cumbre del cerro Catedral se acumularon unos 20 centímetros de nieve y otros cinco en la base. Lo mismo ocurrió en Chapelco y en el Bayo, donde se acumularon unos 15 cm.
La gran sorpresa fue para los turistas, que en ningún caso esperaban que febrero les regalara este espectáculo increíble. Muchos de ellos ascendieron a la montaña y disfrutaron a pleno de una jornada fría en la cordillera.
En Bariloche y toda la región los residentes y visitantes tuvieron que abrigarse y la camperas fueron el atuendo típico de una jornada común de pleno invierno. "Fue una sorpresa maravillosa, poder tocar la nieve en pleno verano es algo que no esperábamos", afirmó Julia Zacardi, una turista centroamericana que jugó fascinada con sus hijos en la cumbre del centro invernal.
Toda la diversión
La montaña lució cubierta de nieve y cerca de un millar de turistas subieron a jugar con el manto blanco.
Paula Gómez, gerente comercial de Catedral Alta Patagonia, pronosticó un buen invierno y dijo que el verano fue muy positivo para los miles de visitantes a la montaña.
El trekking, los descensos en mountain bike, el rappel y los juegos infantiles fueros poster
gados hasta que mejore un poco el clima en la ciudad.
Según señaló Diego Llorente, de la empresa que concesiona el cerro, "lo peculiar es que no se daba algo así desde hace más de diez años. Aunque quienes recuerdan aquel hecho aislado señalan que sólo fue en la parte alta del centro de esquí y no en toda la montaña, por lo que se podría decir que un suceso de similares
características en las dos últimas décadas no está en la memoria de ninguno de los expertos en la materia". Además, aseguró que "las boleterías se colmaron de gente ansiosa por subir a la parte más alta de la montaña a jugar con la nieve, mientras que otros disfrutaron de lo que se había acumulado en la parte baja. Una de las bellas postales fue la plaza Catalina Reynal con los turistas arrojándose bolas de nieve y divirtiéndose a pleno".
Desde el Servicio Meteorológico Nacional se informó que la temperatura promedio ayer en Bariloche orilló los 4 grados y que la máxima se registró hacia las 14, con solamente 7 grados.
El manto blanco también pintó la cima del cerro Otto y las montañas del Cuyín Manzano, ubicados en territorio neuquino, frente a la ciudad.
En el microcentro las actividades fueron reprogramadas y las tradicionales mesitas de la calle Mitre lucieron desiertas.
En la mayoría de los cafés y confiterías, ni siquiera fueron habilitadas. "Nadie se va a sentar a tomar un café con tan baja temperatura", aseguraron en el el café Gino. En Don Pancho, tampoco se desplegaron las sombrillas y todos los clientes optaron por consumir en el interior del local.
Por su parte, los miles de turistas que por estas horas veranean en Villa La Angostura tampoco lo podían creer.
Preparados para un clima un poco más benigno, en los últimos días debieron acostumbrarse al frío cordillerano y ayer tuvieron la mayor sorpresa de la temporada: una espectacular nevada que le cambió la cara al cerro Bayo.
En Junín el clima complicó las actividades de la Fiesta del Puestero (ver página 32). Las lluvias comenzaron desde la madrugada y hasta se convirtieron en agua nieve en alta montaña.
Por caso, la nieve también se hizo presente en cerro Chapelco, en la vecina San Martín de los Andes. (AB-ASM-AVLA)