En una charla donde me expresaba sobre determinado tema, el interlocutor me mira y me dice: tenés que tener una columna de opinión, así el ambiente del básquetbol tendrá un canal donde tomará conocimiento sobre distintos temas de la actividad. ¿Te animás?
Lo consulté con amigos y colegas, y aquí estoy.
Este compromiso que asumo lo tomo con mucho respeto y mi intención es expresar, y compartir con el lector, lo que habitualmente hago, charlar sobre todos los temas y aspectos que rodean al básquetbol.
Abarcaré diversos temas, pero siempre intentaré ser objetivo y que no escapen de la realidad, con los hechos que surjan y que sean de interés.
Sé que mi opinión puede ser coincidente o no con la suya. No busco generar polémica, pero si aportar elementos para el análisis.
Mis palabras se basarán en la experiencia de haber recorrido todos los caminos posibles dentro de la actividad, un caudal que he recogido en las distintas etapas, funciones y lugares, que he vivenciado en este deporte.
Las expresiones tendrán la influencia de mi sentir. Como docente, el punto didáctico; como jugador, su pensamiento; como entrenador, su visión; como gerente de equipo, su función y como dirigente, su responsabilidad.
Quiero en esta primera entrega, dedicarle la columna, a quien fuera mi primer entrenador y orientador de la carrera profesional: León David Najnudel, maestro y amigo.