NEUQUEN (AN).- A pedido de representantes de una quincena de barrios neuquinos, el obispo Marcelo Melani anunció ayer que buscará unir a las partes para tratar de llegar a una solución en el conflicto desatado por la falta de agua. Advirtió a los funcionarios que "hay que dejar de lado los réditos partidarios y trabajar por una solución definitiva".

La polémica en torno de la falta de agua en la ciudad llegó ayer al Obispado neuquino. Su titular no dudó en vincular la dilación del conflicto con cuestiones políticas y les recomendó, tanto a funcionarios municipales como provinciales, que dejen de lado los tintes partidarios para buscar una solución.

"Todo el mundo habla de que estamos en un año electoral", señaló Melani y agregó que "acá la política verdadera es solucionar este problema, sin buscar réditos partidarios que son los que están trabando la solución". Melani explicó que "la política es velar por el bien común y en este caso es brindarle agua a todo el mundo, el problema es que todos quieren sacar ventajas partidarias".

Las declaraciones de Melani se dieron al término de una reunión que mantuvo ayer al mediodía con repre

sentantes de varias comisiones vecinales de la ciudad quienes se mostraron conformes con el contacto mantenido. "Nos vamos contentos y esperamos que el obispo pueda unir las partes para que, sin promesas a futuro, se pueda solucionar definitivamente el problema de la falta de agua", explicó el titular de la vecinal de Hibepa, Héctor Painetru.

La mediación del obispo en el conflicto se da luego de que la semana pasada un encuentro entre vecinos, representantes del EPAS y del municipio derivara en un polémico enfrentamiento verbal entre el presidente del Concejo Deliberante, Martín Farizano, y el gerente de administración del ente, Héctor Ramidán, pelea que estuvo a punto de derivar en golpes de puño.

Melani cuestionó ayer el proyecto del canal del Mari Menuco que impulsa el EPAS y advirtió que "los proyectos a 25 años son importantes pero son mucho más importantes las obras a corto plazo para la resolución inmediata del problema".

De igual modo el prelado aseguró que el hecho de que en Neuquén falte agua "me causa risa porque parece imposible que en una ciudad que es capital provincial y que está rodeada por dos caudalosos ríos no haya agua".

Melani llamó a las partes a "usar el sentido común" y explicó que desde la Iglesia no se habían tomado cartas en el asunto antes ya que aseguró que "creímos que los canales normales de la vida democrática serían la solución pero ahora veremos si podemos ayudar a que encuentren el camino y por eso me voy a comunicar con todas las partes".

Tras el encuentro los vecinalistas indicaron que en la semana le acercarán al prelado una copia del proyecto de marco regulatorio del servicio que se debatirá en el Concejo Deliberante y anunciaron que en diez días se espera una nueva reunión de partes.

"Acordamos que en diez días se va a realizar una reunión en el Obispado entre vecinos, el presidente del Concejo Deliberante y el presidente de la Legislatura porque esos son los dos organismos donde se definen los presupuestos en los que se deben incluir las obras de agua", aseguró Painetru.