La renuncia de Luis Boschi caló hondo en los miembros de la subcomisión que maneja el fútbol del club Cipolletti. Varios son los que quieren dar un paso al costado, aunque esperarán hasta el viernes, un día que se abre como clave para el destino de la institución.

¿Por qué? Porque a partir de las 20 habrá una asamblea ampliada en la sede de la entidad albinegra, a la que fueron invitados todos los hinchas de Cipolletti, autoridades, políticos, órganos de seguridad y entidades intermedia. Del resultado de esa reunión dependerá si la subcomisión sigue o se baja de la conducción del fútbol.

Lo cierto es que los dirigentes albinegros quieren que el gobierno de la provincia y la justicia tomen cartas en el asunto. Repiten que están "solos" y que temen por "lo que pueda suceder de acá en más".

El alejamiento de Boschi pegó fuerte en la directiva, por la agresión de la que fue víctima en el sector de platea de Cruz del Sur y dado el peso específico que tenía en el seno de la subcomisión el empresario de la fruta.

Varios son los que alertan que el conflicto podría terminar de la peor manera, y repiten que el futuro del fútbol albinegro es incierto.