CHOS MALAL (ACHM).- Se profundizaron las medidas en el piquete que mantienen un grupo de desocupados en la ruta nacional 40 impidiendo en forma total el paso de las camiones que transportan gas y de los empresas que trasladan al personal a los yacimientos. La decisión fue adoptada en una asamblea a raíz de que el secretario general del gremio de petroleros, Guillermo Pereyra, no vino a Chos Malal a atender el reclamo de puestos de trabajo en las compañías del sector.

Ayer pasadas las 18 los piqueteros, nucleados en lo que denominan Formación Joven Independiente, decidieron cortar de manera total la ruta nacional 40 entre Chos Malal y el paraje La Salada, lo que complica el paso de camiones con gas licuado desde los yacimientos Filo Morado y El Portón.

La medida adoptada tienen alcance también para los vehículos dedicados a transportar personal a los yacimientos hidrocarburíferos de la región.

Si bien Pereyra había asumido el compromiso de estar en Chos Malal, el encuentro con el intendente Carlos Lator y los desocupados no estaba previsto para ayer sino para la semana próxima, aclaró el sindicalista a "Río Negro".

Pereyra había mantenido una comunicación telefónica con la gente piquete en las últimas horas del domingo. Se interiorizó de la situación pero en diálogo con este medio sostuvo que no negociará bajo presión y que es el gobierno de la provincia el que debe generar empleo.

La ausencia de Pereyra generó malestar entre los manifestantes, que están dispuestos a no dejar pasar a los transportes relacionados con la industria del petróleo y el gas.

La decisión fue adoptada en una asamblea y se mantendrá hasta el lunes a la espera de que Pereyra llegue a la zona y se reúna tal lo previsto con el intendente y los jóvenes desocupados que mantienen cortada la ruta en señal de protesta para hacer escuchar sus reclamos de conseguir trabajo en las empresas petroleras que están radicadas en la zona norte de la provincia.

En el piquete los manifestantes, que cuentan con el respaldo del gremio ATE y de vecinos, se mostraron molestos y aseguraron que no levantarán el corte de ruta hasta no lograr los puestos de trabajo solicitados.

El corte se inició el 29 de enero. En un hecho que ahora investiga la fiscalía de Chos Malal, los manifestantes fueron reprimidos con balas de goma y gases lacrimógenos por la policía provincial. Pese al incidente los manifestantes mantuvieron el corte de ruta que hasta ayer sólo impedía el paso de los camiones que transportan gas de 3 a 5 horas. Según lo manifestado por los desocupados, la continuidad del corte depende de lo que surja en la reunión con Pereyra. Los piqueteros no están dispuestos a dar un paso al costado y el corte definitivo -dicen- seguirá durante siete días.