NEUQUEN (AN).- La paritaria del sector Salud decidió ayer plantearle al gobierno nacional un ajuste de los montos que pagan trabajadores del sector, en concepto de impuesto a las Ganancias. Los sueldos afectados a este impuesto corresponde mayoritariamente a los médicos.

La solicitud, que cuenta con el aval de ATE, UPCN, y los paritarios del gobierno provincial, fue determinada ayer, durante el reinicio de la negociación, tras el receso del último mes. Es un planteo similar al que el año pasado realizaron los trabajadores del petróleo, para evitar que los incrementos salariales que percibieron quedaran anulados por el pago del impuesto.

"Apelamos a la responsabilidad social de Nación y a que se tenga en cuenta que el de los hospitales es un servicio público esencial", dijo el paritario por el Ejecutivo Alfredo Urrutia.

Según consta en el acta del encuentro, los empleados beneficiados serían los de la cuarta categoría del actual escalafón de Salud. El paritario de ATE, Baltasar Alvarez, afirmó que la solicitud podría plantearse a través de legisladores nacionales.

Durante la reunión también se selló un acuerdo unánime para que desde mañana, durante la reanudación de la mesa, se empiece a discutir sobre salarios.

En cuanto a esta determinación, Urrutia dijo que "surgió al tenerse en cuenta que estamos con grandes dificultades para contratar profesionales y enfermeros". Indicó que la negociación en primera instancia "buscará herramientas jurídicas" para que el gobierno eventualmente disponga un incremento. "Para esto es necesario readecuar el esquema laboral y reordenar y rediscutir las bonificaciones que se pagan", dijo.

Se trata de un cambio sustancial, porque hasta antes del receso el gobierno no había aceptado introducir el debate en la agenda de la paritaria.

Con lo quirófanos inutilizados por la falta de anestesistas, que optan por trabajar

en el sector privado por la diferencia de salarios respecto del público, y los incesantes reclamos del personal, el tema encontró su momento.

ATE saludó la propuesta pero la tomó con mesura. Alvarez señaló que "lo que tiene que quedar en claro es que hace falta una recomposición para todos los empleados del sistema, y no una suba sectorizada".

También hubo un acuerdo unánime sobre otro punto importante, con potencial de atenuación del conflicto en los hospitales: UPCN, ATE y el Ejecutivo hicieron una declaración conjunta para que los gobiernos provincial y nacional tomen "las medidas necesarias" para contrarrestar "las actitudes corporativas y desconsideradas como la que ejerce por estos días la Federación Anestesiológica Argentina".

El de la falta de anestesistas es uno de los problemas centrales del sistema público, y tanto desde el gobierno como desde las conducciones hospitalarias acusan de prácticas monopólicas al organismo que nuclea a este sector estratégico de profesionales dentro de la medicina.