Un grupo de asambleístas argentinos que viajaron a Montevideo para realizar una protesta en la plaza principal, en contra de la papelera Botnia, fueron expulsados ayer con insultos y huevazos por un centenar de uruguayos que defienden la instalación de la planta en Fray Bentos.
La violencia también se hizo presente del lado argentino en Colón, donde los manifestantes que estaban cortando el puente debieron levantar el bloqueo porque un grupo de hombre les quemaron los elementos con los que formaban el piquete.
En Montevideo, cinco ambientalistas de Gualeguaychú y dos de esta capital tenían previsto hacer una "volanteada" en la Plaza Independencia para concientizar a la población oriental sobre el daño ambiental que causará la pastera, pero un grupo de uruguayos en contra del reclamo les impidió la manifestación en la Plaza Independencia.
Al respecto, la Cancillería informó que la embajada argentina en Montevideo, a cargo de Hernán Patiño Mayer, "se contactó con el ministro del Interior (interino) del Uruguay, Juan Faroppa, "para informarle acerca del viaje de los asambleístas y solicitarle se arbitraran los medios para que pudieran expresarse libremente y evitar ser víctimas de algún tipo de provocación".
Además, el Palacio San Martín informó que "el Consulado General argentino en Montevideo ha prestado asistencia a los asambleístas, acompañándolos un funcionario de dicha representación hasta su partida de Montevideo prevista para esta noche, a las 20.
La Policía de Montevideo secuestró los volantes que iban a repartir en el centro de la ciudad los asambleístas, quienes denunciaron que los trataron "muy mal" y se quejaron porque "vinimos a prestar un brazo amigo, porque el conflicto se resuelve con el diálogo, y fuimos recibidos con un nacionalismo que no piensa", dijo Jorge García, de la Asamblea de San Telmo.
Los volantes rezaban "No a la papelera Botnia" e incluían una lista de artistas uruguayos que trabajan en Argentina, y de argentinos que desarrollan sus actividades en el vecino país, como ejemplo de la comunión que se mantiene entre ambos pueblos.
Los siete asambleístas llegaron ayer al mediodía a Uruguay en un barco de la empresa Buquebús y marcharon unas diez cuadras hacia la plaza Independencia, donde se encontraron con el grupo de uruguayos. Allí, los defensores de la papelera que los esperaba desde una hora antes, al pie del monumento al prócer José Artigas, comenzaron a insultarlos, les lanzaron huevos y les quitaron y rompieron los volantes que tenían para distribuir a los transeúntes.
Las pancartas que portaban los uruguayos decían: "Piqueteros cerdos, fuera de Uruguay", "Uruguay país libre, mejor limpien el Riachuelo" y "No nos dejaremos pisotear por un grupo de ratas piqueteras", entre otras leyendas.
En medio de la violenta situación, los ambientalistas argentinos fueron obligados a retirarse hasta la terminal portuaria aunque, según explicaron, no adelantarán el regreso previsto para las 20.
Uno de los manifestantes se fue en taxi, mientras que el resto de los asambleístas fue trasladado por una camioneta que consiguió la policía para alejarlos de la zona de disputa.
García también confirmó que radicaron una denuncia por agresiones en la Comisaría primera de Montevideo y que concurrieron al hospital local para verificar las lesiones que sufrieron los asambleístas durante la agresión.
Según afirmó, "fue una provocación montada con el apoyo policial, fue una zona liberada", porque "no fue intervenida hasta 20 o 25 minutos después" de iniciados los incidentes.
En tanto, los asambleístas de Colón, que mantenían un corte sobre la ruta que lleva al puente internacional, denunciaron que una "patota" los obligó a levantar el bloqueo que rige desde el último miércoles en rechazo de la instalación de la pastera sobre el Río Uruguay.
Fuentes de la Asamblea estimaron que los agresores serían los mismos que los atacaron el año pasado y aseguraron que nuevamente les quemaron los elementos con los que formaban la barricada para interrumpir el paso por la ruta internacional 135.
Los voceros sostuvieron que ayer en la mañana un grupo de hombres se acercó al lugar del corte del puente Colón-Paysandú con machetes, hachas y bidones de combustible y levantaron el corte.
De esta manera, solo se mantiene el corte sobre la ruta 136, que une Gualeguaychú con Fray Bentos.
