CIPOLLETTI (AC).- Luego de tres días consecutivos de enfrentamientos entre vecinos y un grupo de menores en las 1.200 Viviendas de Cipolletti, la Policía decidió enviar ocho efectivos del Bora para custodiar las calles de ese sector de la ciudad. Los controles se realizarán sólo entre las 19 y las 7 porque "es el horario habitual de los incidentes".

Se informó que se realizarán operativos de control para evitar nuevos desmanes que podrían terminar en un conflicto de proporciones. Pese a ello la situación sigue siendo tensa en el barrio y hay vecinos que están dispuestos a llegar hasta las últimas consecuencias para resguardar a sus familias y preservar sus viviendas.

El comisario Julio Caliva, quien se encuentra al frente de las unidades policiales de la ciudad, informó que la decisión se tomó a requerimiento de los habitantes que viven en la zona de José Hernández y Cobián después de una reunión entre autoridades de la fuerza y afectados, el sábado a la noche Este encuentro no frenó la situación en el sector puesto que cerca de la medianoche del domingo, nuevamente hubo incidentes.

Según relató Caliva todo comenzó cuando efectivos que realizaban prevención en la zona observaron cuando dos jóvenes arrojaban algún elemento al desagüe. Cuando se constató que se trababa de un arma de fuego, ambos menores de edad fueron demorados.

Poco después de haber sido entregados a sus padres, junto a otros menores, se dirigieron al sector donde viven los vecinos que los denunciaron en varias ocasiones y "volvieron a amenazar con incendiar las viviendas", dijo el comisario.

Los damnificados, que anunciaron que están preparados con "fierros, cadenas, palos y piedras", se alistaron para defenderse y hubo nuevamente un enfrentamiento, sin heridos ni destrozos de consideración.

Según Caliva los menores protagonistas de estos hechos "están identificados y tienen causas abiertas en la justicia". Es por ello que los vecinos se preguntan por qué no se toman medidas para evitar que estas situaciones se repitan en forma constante. Por ahora sólo la presencia de un grupo integrado por ocho efectivos del Bora, tratarán de controlar estos episodios. Ya van tres consecutivos en el fin de semana pero es el cuarto desde que se iniciaron los problemas a mediados del año pasado.