SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- La justicia resolvió en forma favorable el amparo de un vecino a quien la municipalidad le entregó materiales para reconstruir su casa luego de un incendio, y poco tiempo después le impuso una fuerte multa y quiso obligarlo a que la demoliera.

El amparista es Osvaldo Fernández, de 44 años, un trabajador de la construcción que manifestó tener un sueldo de aproximadamente mil pesos y tres hijos a cargo, quien ocupa un predio fiscal situado en la calle Misiones que linda con las costas del lago Nahuel Huapi y del arroyo Ñireco. Allí construyó hace una década una casa de mampostería y madera que el 26 de marzo de 2006 se prendió fuego y quedó prácticamente destruida, pero con su esfuerzo y los materiales que le proporcionaron desde el municipio encaró la reconstrucción del inmueble.

Las circunstancias que motivaron el pedido de amparo se produjeron el 23 de mayo y el 27 de noviembre de 2006, cuando los inspectores de Obras Particulares labraron sendas actas en las que intimaron la paralización de la obra y sancionaron su incumplimiento. Le pedían que presentara los planos, obligación imposible de cumplir, por cuanto no es titular del lote que ocupan.

Poco después, una sentencia de la jueza municipal de Faltas le impuso una multa de $ 2.000 y ordenó la demolición de la obra, a la que calificó de antirreglamentaria y de carecer de autorización municipal, pero el fallo suscripto por los jueces Alejandro Ramos Mejía, Ariel Asuad y Silvia Baquero Lazcano dispuso que se dejen sin efecto esas severas sanciones.

En primer lugar los magistrados atendieron a que la presencia de Fernández y su grupo familiar es reconocido como antiguo en el lugar, al igual que otros vecinos, algunos de los cuales llevan 70 años viviendo en ese espacio público de la ribera norte del arroyo Ñireco. "Situación ésta de obligado conocimiento para la autoridad referida, por lo que ociosamente pudo requerírsele autorización para edificar, como se hizo", expusieron los jueces.

Los magistrados también criticaron que la municipalidad haya adoptado medidas que suscitaran expectativas, al contribuir a paliar las consecuencias del incendio, para que "inmediatamente y en franca contradicción con sus propios actos, imponga una multa y ordene la demolición de la obra cuya construcción tácitamente había autorizado al proveer los materiales a ella destinados".