SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- En una acción rápida y coordinada, la policía logró desbaratar un importante robo y detener a dos conocidos delincuentes sobre quienes habría sobradas sospechas sobre su participación en el hecho.

Los investigadores lograron recuperar el maletín con el dinero que habían sustraído, pero no lograron ubicar las armas que presuntamente utilizaron los asaltantes para amenazar al damnificado.

El hecho se inició a las 17:30 del jueves, cuando a una mujer le sustrajeron el automóvil Fiat Uno bordó que momentos antes había estacionado sobre la calle Moreno, entre Villegas y Rolando.

Media hora después, cuando el gerente de la distribuidora mayorista LOA salía del local ubicado en Elordi 1.054 con un maletín en la mano, fue abordado y amenazado por tres asaltantes que vencieron su resistencia golpeándolo en la cabeza con un caño, hasta que soltó el maletín.

El episodio fue observado parcialmente por un policía que conducía su motocicleta oficial, quien luego de auxiliar al herido se colocó delante del Fiat Uno para tratar de impedir que los asaltantes escaparan. El agente, de apellido Ocares, debió retirar su moto cuando los delincuentes trataron de embestirlo, pero mientras solicitaba refuerzos los siguió hasta Chubut y Genghini, y cuando los sospechosos escaparon en tres direcciones optó por perseguir al que llevaba el maletín, quien no obstante arrojarlo mientras corría fue detenido. Fue identificado como Eduardo Ariel Fernández, de 36 años, oriundo de La Pampa, quien cumplió al menos tres condenas, dos de ellas por portación de arma de guerra, un delito de peligro que para consumarse no requiere que se manifieste el poder ofensivo del arma que posee.

Poco después, en un allanamiento efectuado en una vivienda de la calle Mosconi, en el barrio Ñireco, fue detenido Roberto Boggón, otro delincuente con tres condenas cumplidas que recuperó su libertad hace poco más de un año después de purgar 7 años de prisión por el asalto a las oficinas locales del Correo Argentino.

En la vivienda donde detuvieron a Boggón secuestraron seis teléfonos celulares y un automóvil Ford Sierra con pedido de secuestro.

Entre los procesos que debió soportar Boggón se destaca uno por el homicidio de José Antonio Rubilar, alias "Torta Frita", a quien mató en defensa propia hace una década en el interior de la alcaidía local.