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Jueves 01 de Febrero de 2007
 
Edicion impresa pag. 48 > Sociedad
Carta pública de un amor ofendido
La esposa del ex jefe de gobierno italiano, Berlusconi, Verónica Lario, pidió en una carta que éste se disculpe por haber intentado seducir a otras mujeres. Y lo logró.
Silvio y Verónica, una pasión compartida y sin pelos en la lengua.
Silvio y Verónica, una pasión compartida y sin pelos en la lengua.
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ROMA (DPA) - Verónica Lario, esposa del ex jefe de gobierno italiano Silvio Berlusconi, pidió en una carta abierta que su marido le ofrezca una disculpa. La razón es que el empresario, de 70 años, intentó seducir en público a otras mujeres recientemente. "Silvio me ofendió en mi dignidad", asegura Lario, de 50 años, en una carta abierta que publicó a toda página el diario "La Repubblica". "Exijo una disculpa pública". Y anoche, Berlusconi le pidió perdón.

"Nunca antes se había producido en Italia una disputa marital semejante", aseguró un comentarista de la cadena estatal RAI. "No es broma, porque esta mujer va en serio". Según Lario, Berlusconi le dijo a Ayda Yespica, una joven modelo venezolana, en una noche de gala de la cadena Mediaset: "Contigo iría a todas partes". "Si no estuviera casado, me casaría con ella", comentó luego sobre la presentadora Mara Carfagna, elegida al parlamento por su partido Forza Italia.

Berlusconi accedió en la tarde de hoy al pedido público de su mujer. "Querida Veronica, aquí está mi pedido de disculpas", señaló Berlusconi en su misiva, según medios locales. El multimillonario agregó que su orgullo era demasiado grande para pe

dirle disculpas en privado a su mujer, pero la tentación de responder a su petición pública era demasiado grande. "Eres una persona maravillosa, y para mí siempre lo fuiste, desde el día que nos conocimos y aprendimos a querernos", señaló Berlusconi.

En los 27 años que lleva con Berlusconi, Lario siempre evitó los conflictos, "aún cuando su comportamiento los hubiera justificado", se quejó la ex actriz.

Con su carta abierta, explicó, quiere proteger además la dignidad de sus hijas. Lario ya colocó a su marido en situaciones incómodas en el pasado: "Nunca voté a Silvio. Simpatizo con los socialistas", admitió por ejemplo en su biografía, "Tendenza Verónica". También dijo en ese texto que se opuso a la guerra de Irak. El libro no escatima en críticas a Berlusconi: "Siempre tiene un teléfono pegado al oído, incluso en la comida de Navidad".

Y sólo se alegra realmente con los triunfos del Milan, comentó.

Claro que también Berlusconi dejó traslucir en público asuntos íntimos: en una ocasión afirmó que fue su esposa la que lo presionó para que se sometiera a un lifting. Y hace un año prometió antes de las elecciones parlamentarias que renunciaría al sexo durante meses. Lario se casó con Berlusconi en 1990. El matrimonio tiene tres hijos: Barbara, Eleonora y Luigi.

 
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