KABUL (AP).- La líder de la Cámara de Representantes de Estados Unidos Nancy Pelosi desayunó ayer con soldados norteamericanos en Kabul antes de discutir con el presidente Hamid Karzai planes de Washington de enviar 10.600 millones de dólares en ayuda a Afganistán, dijeron funcionarios.

Pelosi y Karzai analizaron los planes anunciados la semana pasada por el gobierno estadounidense de pedir al Congreso un nuevo paquete de ayuda a Afganistán, dirigido a reconstruir el país y fortalecer las fuerzas gubernamentales de seguridad que siguen combatiendo al Talibán cinco años después de la invasión norteamericana.

A excepción de 2.000 millones de dólares, la ayuda financiera sería empleada íntegramente en las necesidades de seguridad.

La demócrata Pelosi dijo a Karzai que Afganistán tiene apoyo bipartidista en el Congreso, dijo un funcionario afgano a condición de anonimato.

Miembros de la delegación congresional de Pelosi manifestaron también a Karzai que esperaban ver en el futuro más coordinación entre los países de Pakistán y Afganistán, dijo el funcionario.

El Pentágono anunció la semana pasada que una brigada de soldados estadounidenses se quedaría en Afganistán cuatro meses más que lo que se había planeado, lo que equivale a un incremento efectivo de 3.200 soldados.

Pelosi y Karzai hablaron acerca de posibles aumentos mayores de las fuerzas estadounidenses, dijo el funcionario, pero Karzai subrayó su deseo de que se fortalezcan las fuerzas afganas.

Previamente, Pelosi y otros seis congresistas se pasaron una hora en la base estadounidense en Bagram, donde agradecieron a soldados de la 10ª División de Montaña y la 82ª División Aerotransportada por su servicio, dijo el teniente David Accetta, portavoz militar norteamericano.

Pelosi se reunió además con el mayor general Benjamin Freakley, principal general de Estados Unidos aquí. La delegación conversó además con el embajador norteamericano Ronald Neumann y el general David Richards, comandante saliente de las fuerza de la OTAN en Afganistán.