LOS MENUCOS (AJ).- El amor y la comprensión fueron los pilares fundamentales que mantienen unido al matrimonio de don Fermín García y doña Marcelina García, que ayer festejaron 63 años de casados en esta localidad.
Se conocieron Carrilaufquen, cerca de Maquinchao, donde nacieron y vivieron hasta que don Fermín se fue a trabajar como peón a un campo del paraje Colimahuida.
"Al principio fue muy duro, porque cuando nos casamos solo teníamos una cama de palos y una casita de barro. Después con el tiempo nos fuimos comprando cosas y tuvimos nuestros hijos" señalan los abuelos.
Después de muchos años de trabajo como peón y puestero de estancia, el matrimonio se radicó hace treinta años en Los Menucos. Allí, con mucho esfuerzo terminaron de criar a sus cuatro hijos y hoy disfrutan de diez nietos y seis bisnietos.
En el pueblo son muy queridos por su humildad y porque "son muy buen gente" según afirman sus vecinos.
Don Fermín tiene 90 años y doña Marcelina acaba de cumplir 81 años. Pero ahora los roles se invirtieron. A pesar de haber trabajado toda una vida, don Fermín no pudo acceder a una jubilación o pensión y viven con lo que gana doña Marcelina, ex ama de casa, que trabaja como artesana en tejido al telar y la ayuda de los hijos.
Por eso el festejo de ayer fue muy austero y en familia. Al alzar las copas sólo pidieron salud para poder seguir juntos por muchos años más.