NEUQUEN (AN) - Más de 200 industrias y grandes comercios de la región pagarán casi 1.000.000 de pesos extras por la energía que consumieron de más en diciembre pasado respecto del mismo mes de 2005. En el caso de Río Negro, Edersa ya distribuyó las facturaciones con el sobrecosto dispuesto por el gobierno nacional, pero en Neuquén las cosas están atrasadas.
Son los efectos del programa Energía Plus en los consumos de los grandes usuarios de la región.
Los empresarios se quejan, pero funcionarios y directivos de las distribuidoras de luz recuerdan que la Unión Industrial Argentina (UIA) le dio el aval a este esquema que permite no frenar el crecimiento económico a cambio de un aporte extraordinario del sector productivo.
Energía Plus es la manera que la secretaría de Energía de la Nación ideó para conseguir financiar el altísimo costo de poner en movimiento usinas casi obsoletas que den cobertura a una demanda que de otro modo habría superado la oferta del parque generador.
Por ahora, el plan le dio resultados al gobierno porque enero está terminando sin grandes sobresaltos en la red ni en los grandes centros de consumo.
La estacionalidad hace que en nuestra región los riesgos aparezcan recién en febrero, que es cuando los galpones de empaque y los frigoríficos tienen sus puntos más altos de demanda.
Las cosas en territorio neuquino, ya se sabe, podrían complicarse seriamente en Plottier, cuya estación transformadora está al límite y no hay inversiones a la vista que permitan repotenciar esas instalaciones.
En Río Negro la zona de riesgo es siempre la misma: Villa Regina pero no por la transformación de energía sino por su transporte: la ciudad es punta de una línea que nace en Cipolletti y que va perdiendo tensión con los kilómetros.
A finales del año pasado, volvió a entrar en generación la central Turbine Power, en Roca, lo que permite inyectarle a ese tendido potencia extra en mitad de su recorrido.
En Neuquén los grandes usuarios consumieron en diciembre de 2006 una cantidad de energía extra respecto del mismo mes de 2005 equivalente, en el valor que le puso la secretaría de Energía nacional, a unos 700.000 pesos (entre CALF, EPEN y las cooperativas del interior).
En Río Negro, se estima que el sobrecosto fue de unos 300.000 pesos, teniendo en cuenta los clientes de Edersa y los de la Cooperativa de Electricidad Bariloche.
Los más castigados por los efectos del programa Energía Plus son, en ambas provincias, los establecimientos frutícolas, no sólo porque son la mayoría de los usuarios con sobrecargos sino además debido a que el impacto en las facturaciones es mayor al de , por caso, las de las petroleras, por la magnitud de los consumos.