BUENOS AIRES (DyN).- María Cristina Robledo, viuda de José Luis Cabezas, dijo ayer desde España que la justicia se comportó en el caso como si fuera "el cuento de la buena pipa" y sostuvo que es una "tomadura de pelo" lo que hicieron los jueces argentinos.
Desde España, donde vive con su hija Candela, la mujer sostuvo: "Seguramente mucha gente habría dicho 'ya, diez años', pero nosotros vivimos cada día desde el 25 de enero así, con angustia, bronca, impotencia y desolación".
En diálogo con radio El Mundo, Robledo -que trabaja como camarera en Tenerife, Canarias- recordó a su marido y expresó indignación por "el peregrinar" de sus suegros frente a los jueces.
"Este es el cuento de la buena pipa. Te dicen una cosa y hacen otra. En estos diez años he vivido el peregrinar de mis suegros a Dolores para hablar con los jueces y que les digan 'no se preocupen, sabemos lo que están sufriendo, vamos a hacerlo', y a la semana quedaba uno en libertad. Esto es una tomada de pelo, una falta de respeto", añadió.